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Consigue ahora el 40% de reembolsoNo siempre los daños a tu vehículo están relacionados con accidentes de tráfico. A veces, sin moverse, un coche puede sufrir daños considerables y cuya reparación puede ser costosa. Uno de los daños más frecuentes son los daños producidos de forma intencionada o como consecuencia de actos vandálicos. Fíjate cómo tu seguro de coche puede cubrir daños por actos vandálicos y daños intencionados. Pero también, verás que existen ciertas limitaciones y exclusiones.
Imagina la siguiente situación: Has dejado tu coche aparcado y cuando regresas, te encuentras que tiene daños en la carrocería, las lunas o el interior. Estos daños pueden haberse producido de forma accidental por la caída de objetos o partes de fachadas de edificios. Pero también, pudieron haberse producido de forma intencionada por una o varias personas.
Cada tipo de daño tiene un determinado procedimiento para gestionar la reparación de tu coche. Es muy importante aprender a definirlos, pues, las coberturas y exclusiones de las pólizas, dependen de la naturaleza del daño. Fíjate en los tres tipos de daños más comunes.
Los actos vandálicos son cualquier tipo de daño causado deliberadamente por terceros sin un motivo personal contra el propietario del vehículo. Estos actos pueden incluir el rayado de la carrocería, rotura de lunas, pinchazo de neumáticos o vertido de sustancias dañinas sobre el coche.
En España, la mayoría de las pólizas de seguro a todo riesgo cubren los daños ocasionados por actos vandálicos pero con ciertos límites. Estas limitaciones dependen de cada aseguradora y no hay una cobertura estandarizada. Sin embargo, es crucial revisar las condiciones específicas de tu póliza, ya que algunas aseguradoras pueden pedirte una denuncia policial para procesar el reclamo. Además, algunas pólizas a terceros ampliadas pueden incluir esta cobertura como un complemento opcional.
Los daños accidentales son aquellos que ocurren de manera fortuita y no intencionada. Estos pueden ser causados por una colisión con otro vehículo mientras tu vehículo está aparcado y tú no estás presente. Esto puede suceder con objetos fijos, caídas de objetos sobre el coche o cualquier otro evento inesperado que dé como resultado daño al vehículo.
Como te hablamos en nuestro artículo: “¿Quién cubre los daños a tu vehículo por caída de hielo o nieve?”, los edificios y comunidades de vecinos tienen responsabilidad civil. En el caso de que el daño se produzca por una caída de objetos desde un inmueble, puede ser que el seguro de la comunidad, edificio o la vivienda particular sea quien responda por los daños.
Por otro lado, un daño accidental puede suceder en plena vía mientras tu coche está inmóvil. Los daños en la pintura y/o chapa, lunas o faros, suelen ser los más comunes. Una bicicleta, un patinete eléctrico, una mascota o un peatón puede, de forma accidental, rozar tu coche y causar un daño que requiera reparación. En estos casos, es importante determinar si el culpable es imposible de identificar.
La cobertura de daños accidentales varía según el tipo de póliza que tengas. Un seguro a todo riesgo generalmente cubre estos daños, independientemente de quién sea el culpable del accidente. Las pólizas a terceros dejan fuera los daños accidentales a tu propio vehículo.
Los daños intencionados se refieren a aquellos causados deliberadamente por una persona con la intención de perjudicar al propietario del vehículo. Esto puede incluir actos de violencia personal, disputas o cualquier situación en la que el daño al coche sea resultado directo de un conflicto personal.
La cobertura de los daños intencionados puede ser más complicada. Aunque algunas pólizas a todo riesgo pueden cubrir estos daños, muchas aseguradoras evaluarán el contexto del incidente antes de aprobar el reclamo. Es posible que se requiera una investigación para determinar la naturaleza exacta del daño y la relación entre las partes involucradas.
Aquí también se incluyen los daños por robos o hurtos. La rotura de cristales, daños en el interior y cualquier otro tipo de daño, pueden ser consecuencia de un acto delictivo. En estos casos, muchas aseguradoras tienen limitaciones en la cobertura de daños. Asimismo, existen otro tipo de exclusiones y límites a la cobertura que debes conocer. Fíjate en algunos de los más frecuentes.
Hay una serie de elementos que crean confusiones entre muchos conductores y propietarios de vehículos. Una de las más comunes es la idea generalizada y errónea de que un seguro es una cobertura universal e irrestricta. O, lo que es lo mismo, que tu seguro de coche cubrirá cualquier daño sin limitaciones y sin preguntas.
Pero, la realidad puede contrastar mucho con esta idea. La mayoría de las aseguradoras incluyen distintas cláusulas de exclusión a las pólizas de seguro. Y, por si te lo estás preguntando, la Ley del Contrato del Seguro, les permite a las aseguradoras eximirse de pagar de acuerdo a estas cláusulas. Eso sí, siempre y cuando estén establecidas de forma clara y transparente en el contrato inicial.
En este contexto, incluso las pólizas premium y de mayor cobertura, tienen una serie de exclusiones. Además, tienen unos procedimientos que, de no cumplirse, pueden eximir la responsabilidad de la aseguradora. Aunque estas exclusiones y trámites varían entre aseguradoras, estos son los más comunes:
Una de las principales razones por las que un seguro puede negarse a pagar es la falta de denuncia policial. La mayoría de las aseguradoras requieren una notificación a la policía sobre el acto vandálico y presentar una denuncia formal. Esta denuncia es un documento crucial que respalda tu reclamo. Sin ella, la aseguradora puede sospechar de la veracidad del daño o de las circunstancias en que ocurrió.
El retraso en la presentación del reclamo es otra razón común para el rechazo de la cobertura. Las pólizas de seguro especifican un periodo de tiempo dentro del cual debes reportar el daño. Este periodo puede variar, pero generalmente oscila entre 24 y 72 horas. Presentar el reclamo fuera de este plazo puede dar como resultado su denegación.
Los daños preexistentes, a menudo, no están cubiertos por las pólizas de seguro. Si los daños que estás reclamando ya existían antes del supuesto acto vandálico o antes de la contratación del seguro, la aseguradora puede negarse a pagar.
Los accesorios no declarados o modificaciones que no se hayan informado a la aseguradora también pueden excluirse de la cobertura. Si has añadido componentes o accesorios a tu coche sin notificarlo a tu aseguradora o que no estén homologados, estos no estarán cubiertos en caso de daños.
Cada póliza de seguro tiene exclusiones específicas que detallan situaciones o tipos de daños que no están cubiertos. Es fundamental leer y entender estos términos para saber exactamente qué está cubierto y qué no.
La mayoría de los seguros de coche se inhiben de pagar daños producidos durante revueltas civiles, motines o manifestaciones violentas. Si tu coche está aparcado en la calle al momento de un acto de este tipo, podrías tener problemas a la hora de reclamar daños. Por lo general, en estos casos específicos, el Consorcio de Compensación de Seguros podría ser de ayuda. Pero, cada caso es individual y no siempre el consorcio responde ante todos los daños.
Leer también: ¿Debo asegurar los accesorios de mi coche?
La negligencia del propietario es una causa frecuente de rechazo de reclamos. Si el daño ocurrió debido a la falta de cuidado o medidas de seguridad básicas por tu parte, la aseguradora podría negarse a pagar. Por ejemplo, si dejas tu coche con las ventanas abiertas o las llaves puestas y alguien lo daña. Aquí, la aseguradora puede argumentar que no tomaste las precauciones necesarias para proteger tu vehículo. En este sentido, el sitio en el que aparcas habitualmente, puede influir en la cobertura y los límites de esta. Fíjate como.
Recientemente, te hablamos de la influencia que tiene el sitio de aparcamiento en el precio de tu seguro. En nuestro artículo: “¿Cómo afecta el lugar de aparcamiento habitual al precio de tu seguro de coche?”, puedes ver el efecto del estacionamiento habitual en tu prima. Pero, además del precio del seguro, el lugar de aparcamiento puede influir en la cobertura de daños por vandalismo.
Para las aseguradoras, el riesgo es individual y cada póliza se analiza de forma independiente. En ello, las empresas de seguro estudian elementos como la marca y modelo del coche, tu experiencia y tu historial de siniestralidad. De la misma forma, analizan tus desplazamientos, el uso del vehículo y el sitio normal de estacionamiento como factores de riesgo particular.
A medida que tu riesgo individual es mayor, lo más probable es que pagues más por tu seguro y la cobertura tenga mayores límites. Un coche que pernocte en un garaje privado, individual y protegido, tendrá menos riesgos que un coche que aparca siempre en la calle.
Las compañías de seguro determinan el riesgo basándose en los elementos que escapan de tu control. Es decir, un coche que aparca en la calle está más expuesto y vulnerable ante daños intencionales o accidentales. Asimismo, puede ser víctima de actos vandálicos que generen daños de diferente cuantía y hagan que la empresa deba pagar reparaciones con mayor probabilidad.
Y, como has visto, en el sector seguro, más riesgo es siempre sinónimo de mayores alertas sobre tu póliza. Por ende, la póliza podría tener más exclusiones, cláusulas específicas y limitaciones de cobertura.
Sin embargo, esto no es una regla que se cumple de la misma forma en todas las aseguradoras. Por lo que, en la búsqueda del mejor seguro para tu coche, lo más recomendable es analizar la mayor cantidad de ofertas. En nuestra comparador de seguros de coche, puedes hacer esta búsqueda en pocos minutos y sin moverte de casa. Podrás tener un listado 100% personalizado de las mejores coberturas y la mejor relación precio/calidad de tu próximo seguro de coche.
Los daños producidos en aparcamientos privados pueden estar amparados por el seguro de responsabilidad civil del establecimiento. Para ello, es importante comprobar la cobertura de la póliza, pues suelen ser pólizas con coberturas básicas y limitadas. Además, requieren de una serie de comprobaciones específicas y que pueden establecer la excepción de responsabilidad del local.
Algunas pólizas de seguro tienen cláusulas específicas que describen las exclusiones y límites de coberturas de daños generados por robos y hurtos. Es importante revisar las condiciones particulares de la póliza para comprobar estos elementos.
Depende de cada caso en particular, el origen, culpables o naturaleza del siniestro. El seguro puede excluir daños por actos vandálicos, motines y daños producidos por actos civiles. Pero, también, es importante comprobar si no existe un culpable identificado y que sea el que cubra los daños.
El precio del seguro de coche puede cambiar por el lugar de aparcamiento habitual. Los coches que aparcan en espacios privados y de acceso limitado suelen pagar una diferencia con respecto a los coches aparcados en la vía pública.
https://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-1980-22501
https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-1999-21567
https://www.consorseguros.es/afectados-asegurados/seguros-de-riesgos-extraordinarios
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