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Consigue ahora el 40% de reembolsoAcampar es una de las mejores experiencias de la vida. El contacto con la naturaleza, dormir bajo las estrellas y disfrutar del aire puro es un placer. Si tienes una autocaravana o una furgoneta camperizada, la experiencia se multiplica por cien. Pero, en España no puedes acampar dónde quieras o al menos, no sin un permiso de acampada. Descubre cuáles son estos permisos y las sanciones por acampar en una zona prohibida.
Qué bien suena eso de levantarse, abrir la cremallera de tu tienda de campaña y ver el amanecer a la orilla de un lago hermoso. Pasar la noche alrededor de una hoguera asando nubes y cantando al compás de una guitarra. Todas estas imágenes idílicas no son posibles dónde quieras, cómo quieras y cuándo quieras. O, al menos en España dónde existe un férreo control sobre las actividades que se desarrollan en el entorno natural.
El Seprona, el Servicio de Protección de la Naturaleza, es una unidad de la Guardia Civil encargada de velar por el cumplimiento de las leyes en el entorno natural. Esta unidad, junto a otras dependencias de autoridades locales, velan por que nuestros entornos naturales estén protegidos. Y, esto incluye el control de las acampadas al aire libre.
España es un país de clima mediterráneo, nuestros bosques, playas y espacios naturales son frágiles y necesitan ser protegidos. Una colilla no apagada, una hoguera o cualquier fuente de calor puede desatar un incendio que destruya miles de hectáreas en pocas horas. Y, aunque la mayoría de los campistas son respetuosos del medioambiente, otros no lo son tanto.
Por otro lado, la Guardia Civil, bomberos y diferentes cuerpos de rescate, hacen labores de salvamento diariamente. La gran mayoría, por senderistas y campistas que se pierden, entran en lugares peligrosos o que sufren lesiones importantes.
Por estas y muchas más razones, las leyes españolas prohiben la acampada libre y exigen la tramitación de un permiso de acampada que regula esta actividad de forma continua. Estos permisos te indicarán si puedes acampar en una zona, cómo debes hacerlo y por cuánto tiempo. Mira por qué:
La ley es muy clara en torno a la acampada por libre en todo el territorio español: “Está terminantemente prohibido”. Y esto, es una norma sin excepción y sin flexibilidad en cualquier región y bajo cualquier circunstancia.
Sin embargo, esta prohibición no elimina de raíz la posibilidad de que puedas salir a disfrutar de la naturaleza e incluso dormir en ella. Lo que sucede es que sólo puedes hacerlo en aquellos lugares que están permitidos y tras la solicitud de un permiso. Es decir, sólo podrás acampar dónde esté permitido y si has solicitado un permiso especial.
¿Cuáles son estas zonas? La competencia de la administración de las zonas naturales se ha transmitido desde hace un poco más de 40 años a las Comunidades Autónomas. Por lo que, cada región de España tiene una normativa especial y única.
En cada CC. AA., la administración establece las zonas naturales en las que las personas podrán realizar actividades incluyendo la acampada. En la Red de Parques Naturales, puedes ver cuáles son estas zonas en un mapa interactivo bastante completo.
Cada parque natural tiene una normativa específica que regula, en primer lugar, si la acampada está permitida o no. Y luego, cuáles son las condiciones de esta acampada con diferentes normas, tasas y permisos necesarios.
Además, aún teniendo un permiso, las leyes comunitarias, generalmente, se reservan la potestad de restringir o eliminar los permisos por motivos diferentes. Los riesgos de incendio, fenómenos climatológicos especiales u otras razones inherentes a la seguridad del campista y/o el entorno, pueden variar el permiso de acampada.
A pesar de que parece muy sutil, la diferencia entre pernoctar y acampar es muy significativa a la hora de imponer una sanción. Si tienes una autocaravana o un vehículo camperizado, existen muchas zonas a lo largo de España en las que puedes pernoctar sin un permiso especial. Por supuesto, por el contrario, existen espacios naturales en los que está terminante y expresamente prohibido hacer cualquiera de las dos actividades.
Pero ¿cuál es la diferencia entre pernoctar y acampar? Fíjate lo que dice la mayoría de las disposiciones comunitarias: La pernocta se considera para aquellos vehículos especialmente acondicionados para albergar personas. Estos vehículos cuentan con prestaciones de cocina, aseo y espacios para dormir en su interior. Por ejemplo, las autocaravanas, remolques camperizados o vehículos especialmente acondicionados para tal fin. En el Reglamento General de Vehículos se definen cada uno de estos tipos muy claramente.
En cambio, la acampada implica el establecimiento de un sitio de cohabitación en un entorno natural. Esto se refiere a la construcción o armado de espacios para dormir, asearse, cocinar y otras actividades adicionales.
En pocas palabras, si no pones un pie fuera de tu vehículo, es una pernocta y está permitido en espacios expresamente señalados o en zonas naturales en los que no está expresamente prohibido. Si instalas aunque sea un elemento de tu camper, fuera de su superficie, podrías ser considerado como un campista y ser sometido a sanciones.
Y, muy importante, la pernocta sólo se permite por una noche como máximo, si pernoctas en un mismo lugar por más de dos noches, se considerará una acampada.
Aunque parece un tecnicismo muy leve, para la ley es una gran diferencia y debes estar muy atento a ello. Ahora bien, ¿cómo, cuándo y dónde puedes acampar? Fíjate en el procedimiento legal.
A primera vista, pareciera que España prohíbe tajantemente la acampada y no es así. Lo que sí prohíbe es la acampada libre, o sea, sin permisos y regulaciones solicitadas con antelación. Además, los permisos no son iguales en cada municipio, cada provincia o comunidad autónoma. Antes de empacar o desempacar tu tienda y tus utensilios de acampada, te recomendamos entrar en la web de la Red de Parques Nacionales. Allí podrás entrar en cada parque y, de forma centralizada, ver los diferentes permisos de acampada y/o actividades recreativas permitidas.
En términos generales, a pesar de que cada parque actúa de forma independiente, las normas más comunes al acampar incluyen:
Pero, nuevamente, es tu deber informarte de las condiciones particulares de cada parque y respetarlas al máximo. Aunque aparentemente estés en medio de la nada, el Seprona y el servicio de guardaparques estará siempre vigilando que todas las normas se cumplan. Mira lo que pasaría si no respetas la normativa de acampada.
Acampar sin permiso y además, hacerlo en una zona prohibida tiene graves sanciones que van desde los 600 hasta los 6000€. Estas multas varían entre comunidades autónomas, provincias y municipios. Asimismo, tiene diferentes interpretaciones pues, en algunas zonas de mayor fragilidad ecológica, se puede considerar como un delito contra el medio ambiente.
La severidad de las sanciones tiene un fin muy específico, desestimular el turismo dañino y descontrolado contra el entorno natural. Adicionalmente, la obligatoriedad de los permisos le da a la administración la posibilidad de controlar de mejor modo, la actividad humana en zonas especiales.
Cada vez que solicitas y obtienes un permiso, las autoridades te dan una serie de normas especiales que debes cumplir a rajatabla. Contaminar el entorno, generar desechos y/o hacer fuegos en zonas no permitidas, tiene efectos muy importantes en la naturaleza.
El efecto punitivo de las sanciones es innegable y podría ser suficiente para que esta actividad no se realice. Sin embargo, aún con estas multas económicamente significativas, en España, anualmente acampan miles de personas sin permisos.
La consecuencia de estas acciones son cada vez peores. Los campistas sin control generan miles de millones en pérdidas por incendios forestales, contaminación de las aguas y depredación de la flora y fauna silvestre. Además, las unidades de salvamento cada vez más deben emprender labores de búsqueda y rescate a personas que se pierden o sufren lesiones en la naturaleza.
Por ende, hacer caso omiso a las prohibiciones sólo trae consecuencias negativas para el entorno natural y la seguridad personal. Otro elemento que muchas veces es dejado de lado son los vehículos no aptos para funcionar como campers.
Muchas personas conducen furgonetas o vehículos todoterreno que no están acondicionados como vehículos camperizados. Esto puede suponer un riesgo adicional por la carencia de medidas físicas de protección tanto de los ocupantes como del entorno.
Las autocaravanas, remolques y furgonetas camperizadas, se construyen con elementos que proveen seguridad, confort y medios de autonomía especiales. Asimismo, cuentan con depósitos para desechos y sistemas de almacenamiento de residuos.
Es fundamental que cuentes con una protección especial y una póliza de seguro específicamente diseñada para tu vehículo. En la actualidad, existen diferentes pólizas para vehículos camperizados que pueden darte cobertura en cualquier situación en la naturaleza.
Igualmente, estas pólizas cuentan con servicios de asistencia especiales que te pueden ser muy útiles, especialmente, en las zonas más alejadas del entorno urbano. Si quieres contratar la mejor póliza para ti, te recomendamos analizar la oferta actual. En nuestra herramienta de comparación de seguros para furgonetas y vehículos especiales, podrás ver todas las pólizas de todas las aseguradoras en España actualmente.
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En España hay anualmente cerca de 7000 incendios forestales de mayor o menor intensidad. De estos, cerca del 10% son considerados como intencionados y hechos de forma deliberada. Pero, una cifra aún mayor corresponde a los incendios producidos por descuidos y mal manejo de utensilios en zonas boscosas. Las hogueras no apagadas de forma correcta, residuos no recogidos, colillas, lámparas, estufas, calentadores y una larga lista de etcéteras son causantes de cientos de incendios cada año. Especialmente en las estaciones de verano o en zonas de largas sequías.
Si, aunque tengas un permiso de acampada, debes seguir normas específicas de cada parque y zona. No cumplir estas normas puede infringir la normativa y generar multas adicionales.
Los permisos de pesca y caza son muy diferentes a los permisos de senderismo y acampada. No están incluídos uno en otro y, aunque sea sólo de forma recreativa, pescar sin permiso implica serias multas.
La ley permite la pernocta en zonas específicamente señalizadas o en las que no haya una prohibición expresa. Pero, debes saber que no puedes instalar ningún elemento fuera de tu vehículo, debes gestionar tus residuos al interior y no puedes permanecer más de una noche en el mismo lugar.
https://www.reservasparquesnacionales.es/real/ParquesNac/
https://www.miteco.gob.es/es/parques-nacionales-oapn/red-parques-nacionales/parques-nacionales.html
https://www.boe.es/boe/dias/2014/12/04/pdfs/BOE-A-2014-12588.pdf
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