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Consigue ahora el 40% de reembolsoEs obligatorio, según la Ley, llevar en el coche una serie de elementos de seguridad, como chalecos reflectantes o triángulos de emergencia. Sin embargo, el botiquín no es obligatorio en España, a diferencia de lo que pasa en otros países europeos. No obstante, llevar uno en el coche es altamente recomendable, ya que puede servir de utilidad en ciertas ocasiones.
En España la Ley no obliga a llevar un botiquín en el coche, a diferencia de lo que pasa en otros países europeos como Austria o Bélgica. La Dirección General de Tráfico recomienda llevar uno, sin embargo, porque puede ser muy útil en ciertas circunstancias, especialmente si vas a emprender un viaje en invierno, con el riesgo de una mala climatología.
Existen otros elementos de seguridad que sí son obligatorios y cuya ausencia puede llevar a una sanción, como el chaleco reflectante o el triángulo de emergencia, que aunque ha dejado de ser obligatorio su uso en autovías y autopistas desde el pasado 1 de julio de 2023, su obligatoriedad en carreteras convencionales seguirá vigente hasta el 1 de enero de 2026, fecha en la que ya será obligatorio para todos el mundo llevar en el vehículo la señal luminosa V-16.
El botiquín, como hemos visto, no es obligatorio, pero puede ser de gran utilidad en caso de tener que aplicar unos primeros auxilios por un accidente leve o el malestar repentino de un pasajero. El botiquín permite aplicar unos primeros cuidados hasta poder contar con una ayuda sanitaria. La norma internacional DIN 13164 detalla qué es lo que debe haber en un botiquín. Por esta razón es más fácil comprar uno completo en la farmacia que reunir cada elemento por separado. Pueden costar entre 20 y 50 euros, dependiendo de su calidad y contenido.
Éste debe ser el imprescindible para hacer frente a una emergencia básica: guantes quirúrgicos, tijeras, apósitos, algodón, vendas y esparadrapo necesarios para una primera cura, además de antiséptico y desinfectante. También se pueden llevar medicamentos, como pomadas balsámicas para quemaduras y antihistamínicos para picaduras, o pastillas para el mareo, analgésicos comunes para el dolor y algún antipirético para la fiebre, además de una manta térmica y un termómetro. Es útil llevar también un manual de primeros auxilios, aunque lo ideal sería realizar un curso, como los que imparte la Cruz Roja.
Como veíamos más arriba, en el botiquín hay que llevar lo necesario para tratar lesiones leves, como quemaduras, pequeñas hemorragias o cortes, si nos vemos envueltos en un accidente o simplemente un pasajero o el conductor se siente mal repentinamente. A continuación, detallamos lo que debería componer un botiquín, según la normativa DIN 131164, que recoge la revista Consumer, y que indica, además, que el botiquín debería ser de plástico y pesar unos 750 gramos y medir 260mmX170mmX80mm:
La dirección General de Tráfico aconseja, además, llevar a mano la tarjeta de la Seguridad Social o de la Sociedad Médica Privada, la cartilla de vacunación de los niños, información con el grupo sanguíneo y posibles alergias.
No debemos olvidarnos de revisar habitualmente el contenido del botiquín. Lo mejor es hacerlo un par de veces al mes, para reponer lo que se ha gastado o reemplazar algún elemento que se haya estropeado. Por eso es importante llevarlo en un lugar seco y lejos de la exposición al sol y del alcance de los niños.
Esto nos permite, también, revisar los medicamentos o productos con fecha de caducidad. Una idea útil es hacer una lista con todos los productos y con la fecha de su última reposición. También es importante llevar el teléfono de emergencia de la empresa en la que trabajamos, si estamos realizando un desplazamiento profesional.
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El tamaño del botiquín y el material del que está hecho el estuche son importantes, porque deben asegurar su resistencia ante posibles golpes o inundaciones. También es importante que preserven la limpieza y la esterilización de sus componentes. Conviene que sean compactos para poder llevarlos en un hueco del maletero del coche o en la guantera del vehículo.
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En España es recomendable, pero no es obligatorio, al contrario de los que ocurre en algunos países europeos como Austria o Bélgica. La Dirección General de Tráfico recomienda uno que se ciña a la normativa DIN 13164, que establece las medidas y el material del estuche para poder llevarlo en un lugar seguro de nuestro coche y evitar que se estropee con el sol o la lluvia.
Básicamente debe llevar los elementos necesarios para hacer una primera cura en una herida leve, como apósitos, vendas, compresas estériles, esparadrapo, guantes de vinilo y una manta térmica.
Es útil llevar siempre la tarjeta Sanitaria de la Seguridad Social o de la Sociedad Médica Privada, la cartilla de vacunación de los niños y la información sobre el grupo sanguíneo de los distintos miembros de la familia.
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