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en reseñas de GoogleConducir un coche una caravana enganchada puede resultar intimidante al principio, si es la primera vez que lo haces. Una caravana es un remolque de gran tamaño. Por eso, antes de salir a la carretera con él, es necesario tomar en consideración una serie de consejos , relacionados con la manera de conducir, los adelantamientos o la velocidad, que hagan que los trayectos sean más fáciles.
Una caravana es un vehículo especial, que hay que aprender a conducir de forma segura. He aquí algunos consejos que harán que la conducción se produzca sin problemas:
El conjunto total del peso entre el automóvil y la caravana determina qué licencia es necesaria para manejarlo. Se puede usar el permiso B si la caravana supera los 750 kg, pero la suma de vehículo y caravana no excede los 3.500 kg. También es válido conducir con el permiso B si la caravana no supera los 750 kg y el peso conjunto no rebasa los 4.250 kg. Si no se ajusta a estos parámetros, el conductor deberá obtener la licencia B96 o la B+E.
Para conseguir ambos permisos, es esencial tener el carnet B y aprobar ciertas pruebas prácticas. El permiso B96 es requerido si la caravana pesa más de 750 kg y el automóvil al que está acoplada tiene una Masa Máxima Autorizada (MMA) menor a 3.500 kg, y la suma total no supera los 4.250 kg. El permiso B+E es imprescindible si el peso conjunto de vehículo y caravana supera los 4.250 kg, aunque cada componente individualmente no exceda los 3.500 kg.
Al tener un gran volumen, conducir con una caravana enganchada supone un gran riesgo. Por esta razón, es esencial respetar los límites de velocidad al conducir, límites que están por debajo de los fijados para un vehículo convencional. Estos son los límites:
Cuando se prepara un viaje con una caravana, lo primero que hay que tener en cuenta es que hay que revisar tanto el estado del vehículo como el del remolque. Las luces son uno de los elementos más importantes, tanto en el vehículo tractor como en la caravana. A continuación, hay que revisar los neumáticos y controlar que su presión sea la adecuada, así como el estado del enganche entre vehículo y caravana y los cierres de las puertas.
Los remolques suelen pasar muchos meses parados, en un garaje, por lo que esta revisión es imprescindible para comprobar que todo está en orden y así evitar situaciones desagradables que puedan estropear tus vacaciones.
A la hora de cargar una caravana, es muy importante tener en cuenta el peso de cada cosa y repartirlo de forma uniforme en su interior. Cuanto más cerca del eje se coloque la carga, mejor estabilidad tendrá la caravana, conservando el equilibrio entre los dos lados de la caravana y entre la parte delantera y trasera. El peso debe ser algo mayor en la parte delantera.
A la hora de enganchar la caravana con el vehículo, se recogen las patas de la caravana y se sujeta al coche. No hay que olvidar quitarle el freno de estacionamiento y el de mano a la caravana, porque circular con este último puesto puede dañar gravemente los frenos y provocar incluso que se incendien. Es importante también no perder de vista en ningún momento que circulamos con un gran peso enganchado, lo que hace, entre otras cosas, que debamos hacer mucho más amplios nuestros giros.
Maniobrar con una caravana enganchada es complicado, pero con paciencia se aprende a hacerlo. Lo esencial es no precipitarse, es preferible ir lento, pero con seguridad. En realidad, es un consejo que también vale para la conducción en general. Eso sí, adelantar es algo que no debes hacer casi nunca y tener paciencia si circulas detrás de un camión lento en una carretera de doble sentido.
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La paciencia es fundamental cuando se conduce con caravana y la hora de llegada debe ser siempre muy flexible. Es importante evitar las maniobras bruscas y mantener un ritmo constante de circulación, para que no se dispare el consumo, y sin forzar en las subidas y en las bajadas. Es útil aprovechar el final de las bajadas para coger ímpetu y subir la siguiente pendiente. En cuanto al seguro, es obligatorio contratar uno que cubra la responsabilidad civil y los daños a terceros. En algunas ocasiones, basta con las coberturas que incluye la póliza del coche. El seguro independiente de una caravana es obligatorio cuando la caravana pesa al menos 750 kg.
Es aconsejable hacerlo a poca velocidad y de forma constante. No se puede viajar dentro de la caravana cuando esta está en movimiento. También hay que tener muy en cuenta la distancia de seguridad, que aumenta mucho, y la necesidad de hacer giros amplios.
Es posible hacerlo con el carnet B, si la caravana pesa más de 750 kg, pero el conjunto de caravana y coche no va más allá de los 3.500 kg. Si la caravana pesa menos de 750 kg, pero el conjunto no va más allá de los 4.250 kg, también es posible conducir con el carnet B. Si el peso va más allá, hay que sacarse el carnet B+E.
Hay que colocar el peso lo más cerca posible del eje, conservando el equilibrio de ambos laterales y entre la parte trasera y delantera., aunque el peso debe ser algo mayor en la parte delantera. Para circular hay que quitarle a la caravana el freno de estacionamiento y el de mano.
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