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Polígono Industrial San Lorenzo, Santalaitz Kalea, 2,
20570, Bergara, Gipuzkoa
Horario: Lunes a Viernes de 8:00h a 19:30h
Sábados de 8:00h a 13:30h
Web: www.itasua.com
Mail: [email protected]
Teléfono ITV Bergara: 943 76 97 53
Para acudir a la revisión de la ITV Bergara es preciso hacer una reserva en la página web. Esto es así en la mayoría de los casos. También es posible abonar la revisión online y luego presentar el recibo en la estación. De esta manera, se evitan retrasos innecesarios. Para reservar la cita previa, hay que proporcionar la matrícula del vehículo y la fecha de matriculación. Es importante tener en cuenta que la reserva y la revisión sólo pueden hacerlas el titular del vehículo. Si no le es posible, deberá autorizar a otra persona por escrito.
La ITV Bergara supone una revisión bastante sencilla del vehículo. Si este está en buenas condiciones y si el titular tiene la documentación necesaria, no habrá problemas. Sin embargo, para asegurarte de que todo está en orden, puedes revisar algunos elementos del vehículo: las luces, el dibujo de los neumáticos, los frenos, la dirección, las escobillas limpiaparabrisas, las puertas y las ventanillas. Una de las partes más importantes de la revisión es el control de emisiones, que certifica que el vehículo no emite más emisiones contaminantes de las autorizadas. Para ello, puedes purgar el vehículo antes de la revisión. Empieza por comprobar el nivel de aceite del motor, que debe estar entre el mínimo y el máximo de la varilla del depósito. Después, arranca el vehículo y realiza varias aceleraciones con un intervalo de 30 segundos. Una de las fases más importantes de la revisión es el control de emisiones. En la línea de revisión, el vehículo deberá estar a unas 2.500 revoluciones por minuto, si es ligero, y a 1.500, si es pesado. El ventilador siempre debe estar funcionando. Al ir a pasar la revisión, debes mantener el coche al ralentí hasta que comiencen las pruebas.
La documentación obligatoria para pasar la ITV Bergara es el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos, en la que se sellan las distintas revisiones y que debe ser original. Si no encuentras el original del permiso de circulación, es posible presentar una fotocopia o una nota simple de antecedentes que puedes obtener en la Jefatura Provincial de Tráfico. Puede ser también buena idea tener a mano el último recibo del seguro obligatorio del coche, aunque no es obligatorio, y la estación lo puede consultar telemáticamente.
El momento idóneo para solicitar una revisión depende del tipo de vehículo y de su antigüedad. Cada vehículo tiene su calendario de ITV. Por ejemplo, en el caso de los turismos, la revisión comenzará cuatro años después de la matriculación. Es importante tener en cuenta que dispones de 30 días naturales antes de la caducidad de la última revisión, para reservar la cita, lo que facilita el proceso, aunque esto no modifica el calendario de las siguientes revisiones. Puedes informarte sobre las fechas de las distintas revisiones en la tarjeta de la ITV y en el informe de inspección que proporciona el centro de ITV.
Una revisión de la ITV puede dar como resultado un diagnóstico favorable, uno desfavorable o uno negativo. Si el diagnóstico es favorable, el vehículo obtendrá el sello de la inspección y podrá seguir circulando sin problemas. Pero en los dos últimos casos, el vehículo deberá pasar por el taller y regresar a la estación a hacer una nueva revisión. Esto es así porque la revisión ha detectado problemas graves o muy graves. Dispones de un plazo de dos meses para solventarlos y presentarte de nuevo en una estación de ITV. En el caso de una calificación desfavorable, el coche sólo podrá circular para acudir al taller y regresar a la ITV. En el caso de una calificación negativa, el vehículo solo puede desplazarse en grúa.
La ITV es obligatoria en España para poder circular. Si no la has pasado, te arriesgas a una multa de 500 euros, porque se considera una infracción grave, y, además, las autoridades de Tráfico pueden inmovilizar tu vehículo. Debes acudir a un taller para solucionar los problemas detectados y pasar de nuevo la ITV. La multa por una ITV caducada es de 200 euros.
Los vehículos de gran tamaño y peso, como los camiones de más de 3.500 kg deben pasar la ITV cada año, hasta cumplir 10, momento en el que la ITV se hace de forma trimestral. En el caso de estos vehículos, la ITV incluye, además, una prueba especial de frenado, que es obligatoria desde 2019. En el caso de los remolques, se pueden dar dos situaciones: los que superan los 750 kg deben pasar la ITV como un vehículo más, mientras que los que están por debajo de este peso se benefician de la misma revisión que el vehículo al que están enganchados, ya que tienen la misma matrícula.
Los coches históricos son aquellos que tienen más de 30 años, los que han dejado de fabricarse o los que conservan intactas todas sus piezas originales. Desde 2023, este tipo de vehículos no están obligados a pasar la ITV, si su matriculación fue antes del uno de enero de 1950. Por encima de esa fecha, los vehículos deben pasar la ITV cada dos años, una vez cumplidos los 40 años, cada tres hasta los 45 y cada cuatro, a partir de los 45. Esto ocurre también con los ciclomotores. Cuando se trata de matricular en España un coche extranjero, es obligatorio que pase antes la ITV.
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A la hora de escoger la estación de ITV para realizar la revisión de tu vehículo, tienes total libertad para escoger la que mejor te convenga. Esto es así también cuando se trata de hacer una segunda revisión tras un diagnóstico desfavorable o negativo. Los usuarios pueden escoger la estación de ITV que prefieran.
Una vez pasada la ITV, en la estación te harán entrega de una pegatina, que deberás colocar obligatoriamente en la parte superior derecha del parabrisas. Esta pegatina permite a las autoridades de Tráfico comprobar de un vistazo que el vehículo está en regla. Si no llevas la pegatina y en lugar visible, estarás cometiendo una infracción leve, que supone una multa de 80 euros y no supone una pérdida de puntos.
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