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C/ de Ntra. Sra. de Valverde Nº179
28034, Madrid
Horario: Lunes a jueves de 7:00h a 20:30h.
Viernes, de 7:00h a 20:00h
Sábados, de 8:00h a 14:00h.
Teléfono: 91 734 7395
Web: www.grupoidev.com
Email: [email protected]
La mayoría de las estaciones conceden cita previa para pasar la ITV Fuencarral. Se solicita a través de su página web y sólo necesitas proporcionar la matrícula, el tipo de vehículo y algunos datos personales. La página te asigna entonces un día y una hora en función de la disponibilidad de la estación. De esta manera te evitarás esperas innecesarias. También puedes abonar la inspección a través de la web y luego presentar el recibo si es necesario. La cita debe tomarla el titular del vehículo o una persona autorizada por él.
La revisión de la ITV Fuencarral es relativamente sencilla y rápida si tu vehículo está bien cuidado y tienes toda la documentación necesaria. Pero, si tienes alguna duda sobre el resultado, puedes hacer una revisión de tu vehículo: revisa las luces, el dibujo de los neumáticos, los frenos, la dirección, las escobillas limpiaparabrisas, las puertas y las ventanillas. Asegúrate también de que todos los elementos del vehículo están homologados. Una de las pruebas más importantes es la del control de emisiones, que comprueba que el vehículo no contamina más de lo permitido. Puedes preparar el vehículo para la revisión haciendo una pequeña purga del motor. Lo primero que debes revisar es el nivel de aceite —que debe estar entre el mínimo y el máximo de la varilla del depósito, de lo contrario puedes rellenar éste—. A continuación, arranca el motor y realiza varias aceleraciones, con un intervalo de 30 segundos. Mantén el motor a unas 2.500 revoluciones por minuto, si se trata de un vehículo ligero, y a unas 1.500 si se trata de un vehículo pesado. El ventilador debe estar en marcha y puedes dejar el motor al ralentí hasta que entre en la línea de inspección.
Para pasar la ITV, necesitas el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos, que se sella tras cada revisión y que, por esta razón, debe ser la original. Si la has extraviado, la estación te puede proporcionar un duplicado. En cuanto al permiso de circulación, puedes presentar una fotocopia o una nota simple de antecedentes que se puede obtener en la Jefatura Provincial de Tráfico. El recibo del seguro en vigor no es obligatorio, pero no está de más tenerlo a mano.
Los vehículos tienen un calendario de revisiones en función de su matrícula y su tipo. Los turismos, por ejemplo, no están obligados a pasar la ITV hasta el cuarto año después de su matriculación. En cualquier caso, debes tener en cuenta que cuentas con un plazo de 30 días naturales antes de la caducidad de la anterior revisión para solicitar cita. Esto evita olvidos o esperas innecesarias.
Una vez terminada la revisión de la ITV, pueden darte un diagnóstico favorable, desfavorable o negativo. En el primer caso, tu vehículo podrá seguir circulando sin problemas hasta la siguiente revisión. En los dos últimos casos, estos diagnósticos significan que la inspección ha encontrado graves o muy graves defectos y que deberás regresar para una segunda inspección, una vez que los hayas solventado en un taller. Un resultado desfavorable supone una infracción grave y el vehículo solo puede utilizarse para acudir al taller. Un resultado negativo supone una infracción muy grave y el vehículo solo puede desplazarse en grúa.
En España no se puede circular sin la ITV en regla. Hacerlo se considera una infracción muy grave que puede llegar a suponer una multa de 500 euros. Además, las autoridades pueden inmovilizar el vehículo si detectan que tiene graves deficiencias, de manera que solo podrás desplazarte hasta el taller para subsanar los defectos del vehículo, y luego pasar la inspección. Si circulas con la ITV caducada, la multa es de 200 euros.
Los vehículos de gran y tamaño y peso, como los camiones de 3.500 kg, deben pasar una ITV cada año, hasta que cumplan una década y entonces la ITV pasa a ser semestral. Deben pasar, además, una prueba especial de frenado, obligatoria desde 2019. En el caso de los remolques, solo están obligados a pasar la ITV los que tienen un peso superior a 750 kg, ya que los remolques con una masa autorizada inferior se benefician de la revisión del vehículo al que están enganchados, puesto que tiene la misma matrícula.
Un vehículo es histórico cuando tiene más de 30 años, ha dejado de fabricarse o todas sus piezas siguen siendo las originales. Desde el año 2023, estos vehículos no deben pasar la ITV si fueron matriculados antes del 1 de enero de 1950, cada dos años una vez cumplidos los 40 años, cada tres hasta los 45 y cada cuatro, a partir de los 45.
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El titular del vehículo tiene total libertad para escoger la estación de ITV que más le convenga. Ni siquiera es obligatorio acudir a la misma estación, si se trata de una segunda visita tras un diagnóstico desfavorable o negativo.
Una vez pasada la ITV, la estación te hace entrega de una pegatina que debes colocar obligatoriamente en la parte derecha superior del parabrisas. Si no lo haces, te pueden multar con hasta 100 euros, aunque lo habitual son 80 euros y no implica ninguna pérdida de puntos. La pegatina es importante porque informa a las autoridades de Tráfico de que el vehículo tiene la ITV en regla.
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