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Pruvia de Abajo, 89,
33192, Asturias
Horario: de Lunes a Viernes, de 07:00h a 21:00h
Teléfono: 985 26 33 17
Web: www.itvasa.es
Para pasar la ITV Pruvia, debes pedir cita previa en la mayoría de las estaciones, en su página web. Para ello, debes proporcionar la matrícula y el tipo de vehículo y la agenda te asigna un día y una hora en función de la disponibilidad. De esta manera te evitarás esperas innecesarias. También puedes abonar la revisión online y presentar después el resguardo. La cita debe tomarla el titular del vehículo o una persona autorizada por él.
La inspección no es un proceso complicado, siempre que el vehículo esté en buenas condiciones y tengas toda la documentación necesaria. Pero si quieres asegurarte de que obtendrás un diagnóstico favorable, puedes hacer una pequeña revisión antes de acudir a la estación: revisa las luces, el dibujo de los neumáticos, los frenos, la dirección, las escobillas limpiaparabrisas, las puertas y las ventanillas. Otro elemento importante es que todos los complementos del vehículo estén homologados. Además, puedes purgar el motor para que pase con éxito el control de emisiones, que comprueba si el vehículo se ajusta a las emisiones fijadas por la Ley y no son superiores. Para ello, empieza por comprobar el nivel de aceite del motor: debe estar entre el mínimo y el máximo de la varilla del depósito. A continuación, pon en marcha el motor y realiza varias aceleraciones, con un intervalo de 30 segundos entre ellas. Cuando llegues a la estación, el vehículo debe tener el motor a unas 2.500 revoluciones por minuto, si se trata de un vehículo ligero, y a unas 1.500 si se trata de un vehículo pesado. El ventilador debe estar en marcha. Puedes dejar el motor al ralentí hasta que entré en la línea de inspección.
Para pasar la ITV necesitas presentar el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos. Del primero puedes presentar una fotocopia o una nota simple de antecedentes que puedes solicitar en la Jefatura Provincial de Tráfico. El segundo debe ser original, porque se sella tras la revisión. Sin embargo, si lo has extraviado, puedes solicitar una nueva en la estación de la ITV. Los vehículos matriculados después de 2016 disponen de una tarjeta electrónica. Pueden solicitarte el último recibo del seguro, aunque no es obligatorio, y en caso de no tenerlo, se puede consultar telemáticamente.
El calendario de las revisiones de la ITV depende de la antigüedad y del tipo de vehículo. Los turismos, por ejemplo, sólo tienen que pasar la primera revisión cuatro años después de su matriculación. Es importante, en cualquier caso, que recuerdes que dispones de 30 días naturales antes de la caducidad de la anterior revisión para pedir cita. De esta forma, se evitan esperas y olvidos.
Al pasar la ITV, puedes obtener un diagnóstico favorable, que te permitirá seguir circulando con normalidad hasta la siguiente revisión, pero también el diagnóstico puede ser desfavorable o negativo. En estos dos últimos casos, la revisión ha localizado problemas en el vehículo que pueden ser graves o muy graves. Tendrás que acudir a un taller y luego regresar a la estación para una nueva comprobación. Tienes un plazo de dos meses para ello. Pero debes tener en cuenta que si el diagnóstico es desfavorable solo podrás circular para acudir al taller y regresar a la estación y que si es negativo, el vehículo solo podrá desplazarse en grúa.
No se puede circular sin la ITV en regla en España. Si lo haces, pueden ponerte una multa de 500 euros, por una infracción grave. Además, las autoridades de Tráfico te pueden inmovilizar el vehículo, de manera que solo podrás desplazarte hasta el taller para subsanar sus defectos del vehículo, y luego pasar la inspección. Si se circula con la ITV caducada, la multa es de 200 euros.
Los vehículos pesados, como los camiones de 3.500 kg, deben pasar la ITV cada año y tras cumplir 10, de forma semestral. Este tipo de vehículos deben someterse también a una prueba especial de frenado, obligatoria desde 2019. Los remolques no están obligados a pasar una ITV propia si su peso está por debajo de los 750 kg, porque se benefician de la ITV del vehículo al que están enganchados, ya que tienen la misma matrícula. Sin embargo, cuando sobrepasan ese peso, deben someterse a una inspección propia.
Se considera que un vehículo es histórico si sobrepasa los 30 años, si tiene todas sus piezas originales intactas o si ha dejado de fabricarse. Desde 2023, este tipo de vehículos no están obligados a pasar la ITV si fueron matriculados antes del 1 de enero de 1950. A partir de esa fecha, deben pasar la ITV cada dos años una vez cumplidos los 40 años, cada tres hasta los 45 y cada cuatro, a partir de los 45.
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No es obligatorio acudir a una determinada estación de ITV, ni siquiera si se trata de una segunda revisión tras un diagnóstico desfavorable o negativo. Puedes escoger el que mejor te venga.
Una vez pasada la ITV con un resultado favorable, la estación te proporciona una pegatina, que debes colocar en la parte superior derecha del parabrisas. Esto es obligatorio, porque informa a las autoridades de Tráfico de que el vehículo tiene la ITV en regla. No llevar la pegatina puede suponer una multa de hasta 100 euros, ya que se considera una infracción leve. Habitualmente no suele sobrepasar los 80 euros y no supone una pérdida de puntos.
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