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ITV Trápaga
Barrio El Juncal, s/n
8510, Valle de Trápaga, Bizkaia
Horario: lunes a viernes, 7.00h a 21:15 h.
Sábados, 08.00 a 14.00 h.
Web www.itelink.es
Teléfono: 944 78 12 14
La manera más adecuada de reservar, y en muchos casos la única, es hacerlo a través de la página web de la estación. Debes proporcionar la matrícula del coche y su fecha de matriculación. Además, en la mayoría de los casos puedes pagar por adelantado online. Cuando acudas a la estación para la revisión deberás mostrar el resguardo del pago. En algunas estaciones, la reserva se puede hacer también por teléfono. En cualquier caso, la reserva la debe hacer el titular del vehículo y, en su defecto, una persona designada por él con un escrito de autorización.
La revisión de la ITV Trápaga comprueba que el vehículo está en buenas condiciones para circular. Para evitar problemas, conviene hacer una revisión previa de las luces, el dibujo de los neumáticos, los frenos, la dirección, las escobillas limpiaparabrisas, las puertas y las ventanillas. También debes cerciorarte de que todas las piezas del vehículo están homologadas, de lo contrario, la ITV no será favorable. Una de las pruebas más importantes es la del control de emisiones. Es conveniente que revises el nivel de aceite, que debe estar entre el mínimo y el máximo de la varilla del depósito. En caso contrario, debes rellenarlo. También puedes purgar el motor, justo antes de pasar la inspección: arranca el motor y realiza varias aceleraciones con un intervalo de 30 segundos. Al llegar a la línea de revisión, el motor debe estar caliente, a unas 2.500 revoluciones por minuto, si se trata de un vehículo ligero, y a unas 1.500 si se trata de un vehículo pesado. El ventilador debe estar en marcha. Antes de pasar la revisión, puedes dejar el motor al ralentí.
Para pasar la ITV Trápaga, debes presentar obligatoriamente el permiso de circulación y la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos, que recibe un sello tras la inspección. Debe ser la original. Si no tienes el permiso de circulación, podrás presentar, en su lugar, una fotocopia o una nota simple de antecedentes que obtendrás en la Jefatura Provincial de Tráfico. Conviene que lleves un resguardo del último pago de tu seguro de coche obligatorio y, por supuesto, el DNI.
Las inspecciones de la ITV dependen del tipo de vehículo y de su fecha de matriculación. En el caso de los turismos, deben pasar cuatro años antes de realizar la primera revisión desde su matriculación. La Ley permite también realizar la inspección hasta 30 días naturales antes de la caducidad de la anterior inspección. De esta manera, se evitan olvidos o prisas. Este adelanto, sin embargo, no afecta a la fecha de la siguiente revisión. Las distintas fechas están apuntadas en la tarjeta de inspección y en el informe de proporcionado por el centro de ITV Trápaga.
Tras pasar la ITV Trápaga, se puede obtener un informe favorable, desfavorable o negativo. En el primer caso, la estación sella la tarjeta de la ITV y el vehículo puede seguir circulando con normalidad. Sin embargo, la estación puede emitir un informe desfavorable si detecta algún defecto grave. Esto impide que el vehículo circule y que sólo pueda hacerlo para acudir a un taller. El titular tiene un plazo de dos meses para subsanar los defectos y regresar a la estación de la ITV para una nueva revisión. La ITV puede dar lugar también a un informe negativo, lo que supone la existencia de problemas graves. En este caso, el vehículo deberá ser llevado al taller en una grúa. El plazo para subsanar los problemas es también de dos meses
Pasar la ITV es obligatorio. Si circulas sin tener un diagnóstico favorable o negativo, te expones a una sanción. Si el resultado ha sido negativo y sigues circulando, se considera una infracción muy grave y te arriesgas a una multa de 500 euros y a que te inmovilicen el vehículo y sólo podrás llevarlo al taller en grúa. Si la ITV está caducada, se considera una falta grave y la sanción es de 200 euros.
Los vehículos pesados, de más de 3.500 kilos, deben pasar una revisión anual de la ITV hasta los diez años de antigüedad. A partir de entonces, la ITV será cada seis meses.
Los remolques no están obligados a pasar la ITV si pesan menos de 750 kg: se benefician de la revisión del vehículo al que están enganchados, puesto que llevan la misma matrícula. Los remolques de más de 750 kilos sí deben pasar la ITV. Los vehículos pesados deben pasar, además, una prueba especial de frenado, obligatoria desde 2019.
Los coches históricos son los que han cumplido más de 30 años o han dejado de fabricarse. También se consideran coches de este tipo los que no han cambiado ninguna de sus piezas desde el momento de su matriculación. En 2023, se estableció que, una vez cumplidos los 40 años, estos coches deben pasar la ITV cada dos años, cada tres hasta los 45 y cada cuatro, a partir de los 45.
El titular del vehículo tiene total libertad para escoger la estación de ITV que mejor se adapte a sus necesidades. Tampoco es obligatorio acudir a la misma estación cuando hay que hacer una segunda visita tras un resultado desfavorable.
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Una vez pasada la ITV, es obligatorio colocar en la parte derecha superior del parabrisas una pegatina que demuestra que la revisión ha sido favorable. Esta pegatina facilita a las autoridades de tráfico comprobar de un vistazo que el coche está en regla. La multa por no llevar la pegatina de la ITV es de hasta 100 euros, ya que se considera una infracción leve. Habitualmente no suele sobrepasar los 80 euros y no supone una pérdida de puntos
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