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en reseñas de GoogleTu coche está sujeto al deterioro producto del desgaste de sus piezas, el uso, falta de mantenimiento y la exposición a los elementos naturales. ¿Sabías que la DGT ha iniciado una campaña enfocada en mejorar el parque automotor español? Dentro de esta nueva visión de la administración, algunos defectos o daños del coche deberán ser reparados para evitar multas y poder circular sin problemas. Sigue leyendo y descubre cuáles son.
Si analizas detenidamente tu coche, verás que lo que parece una sóla máquina, es en realidad un sofisticado sistema de muchas piezas juntas. Cada pieza forma parte de un subsistema que está allí para ejercer una función específica y que afecta al funcionamiento del conjunto. Todo esto quiere decir que una sóla pieza que se averíe, por más pequeña que sea, puede hacer que tu coche deje de funcionar.
En España, la inspección técnica de vehículos es bastante rigurosa pues busca que todos los coches en circulación cumplan con las regulaciones. Sin embargo, el tiempo entre inspecciones puede ser largo si en el interín alguna pieza se rompe o muestra desgastes.
Es por esta razón, sumada a la antigüedad promedio de los coches españoles, que la DGT ha iniciado una campaña de comprobación del funcionamiento. Esta campaña, que pretende ser permanente, multará a aquellos coches que tengan desperfectos, averías o fallos en sus sistemas.
Evidentemente, hay algunos desperfectos imperceptibles incluso para ti que usas el coche a diario. No obstante, hay muchos daños y defectos de tu coche que saltan a la vista y que pueden ser un riesgo para tu seguridad y la de los demás. Fíjate en cuáles son estos puntos a analizar:
Es prácticamente imposible decir que una pieza o un sistema de tu coche es mejor o más importante que otro. Sin embargo, a los ojos de la DGT, existen ciertas funciones que son más relevantes en términos de la seguridad vial. Algunas de las que más atención van a fijar los agentes de policía serán:
Los neumáticos son una parte fundamental en la seguridad de tu coche. No sólo te permiten una circulación confortable y estable sino que son imprescindibles para la frenada, agarre en el pavimento y maniobrabilidad de tu coche. Por ende, los neumáticos tienen que tener:
Las luces de los faros, tanto a corta y larga distancia como las luces intermitentes y de emergencia son cruciales en tu coche. Los desperfectos de las luces pueden representar un riesgo mayor a la seguridad. Por lo tanto, los faros deben ser claros y sin desperfectos o roturas. Los cambios de luces deben funcionar perfectamente y tanto ambas luces intermitentes como las luces de emergencia deben funcionar.
Sin un sistema de frenos que funcione de forma sincronizada, precisa y perfecta, tu coche puede ser un riesgo mayor en la vía. No sólo para la seguridad de los demás sino para tu propia protección y la de tus ocupantes. Los frenos deben accionarse desde el pedal a la perfección, sin ruidos y sin distancias de frenada mayores a las adecuadas.
Girar a un lado u otros así como obtener una respuesta directa entre el volante y las ruedas delanteras debe tener una sincronía perfecta. No poder ejercer esta acción te impedirá esquivar obstáculos y/o prevenir accidentes. No debe haber ruidos extraños o impedimentos a que se hagan los giros. La alineación de las ruedas será un elemento adicional que los agentes comprobarán.
La contaminación y cuidado del medio ambiente ha adquirido actualmente un peso tan importante como cualquier otro sistema del coche. Por ello, los coches con emisiones de gases superiores a las permitidas o con desperfectos que emitan gases o humos serán sancionados. Los desperfectos del motor pueden generar gases ennegrecidos, blancos o abundantes, lo que puede ser considerado como una grave infracción medioambiental. Los resonadores de tubos de escape o desperfectos del silenciador serán considerados como elementos de contaminación sónica.
No, la estética de tu coche no será un elemento a considerar como sujeto a infracciones. Pero, si la carrocería y el estado general del coche tiene desperfectos que comprometan la seguridad de todos, sí será sancionado.
Es decir, las carrocerías oxidadas, rotas, enmendadas o con elementos peligrosos podrán estar sujetas a multas.
Las lunas y parabrisas rotos, limpiaparabrisas que no funcionan y otros elementos que impidan o reduzcan la visión serán sancionados. Asimismo, se comprobará el estado del claxon, cinturones de seguridad, sillas de retención infantil y el estado general del habitáculo. Todos los elementos que atenten contra la seguridad serán objeto de sanciones.
Está claro y probado históricamente que sí no hay una sanción, la efectividad de las leyes no alcanza sus objetivos. Es por ello que la DGT ha creado una serie de sanciones que permitan crear conciencia sobre un tema que atañe a todos: la seguridad vial. Las estadísticas prueban que los desperfectos en los vehículos son responsables de un gran número de accidentes viales. En este contexto, la administración determina con bastante claridad las multas generadas por fallos y desperfectos en los sistemas del coche.
| Fallo, desperfecto, inexistencia o mal funcionamiento | Multa |
|---|---|
| Neumáticos rotos, abollados o con bandas de rodadura con menos de 1,5 mm de espesor | 200€ |
| Luces defectuosas o sin funcionar | 200€ |
| Cinturones de seguridad defectuosos o inexistentes | de 200 a 500€ |
| Lunas y parabrisas rotos, manchados o con elementos de distracción | 200€ |
| Frenos y sistemas de dirección defectuosos | 200€ |
| Circular con una ITV desfavorable, negativa o caducada | 500€ |
Otro punto fundamental es lo referente a las reformas y modificaciones no homologadas en tu coche. Anteriormente, hemos hecho un análisis profundo de cuáles son estas modificaciones homologables. Conviene que le des un repaso para comprobar si debes pedir una cita en la ITV para homologar la tuya.
De forma generalizada, si tu coche tiene alguna reforma o una modificación a su motor, carrocería o sistemas principales, debe homologarse. Asimismo, puedes comprobar cuáles son estas modificaciones en el Manual de Reforma de Vehículos del Ministerio de Industria y Comercio.
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones, ha hecho un estudio profundo de la antigüedad del parque automotor español. De acuerdo con estos estudios, los coches españoles rondan una antigüedad de 13,5 años. España es uno de los países europeos con parque más envejecido pues la media europea ronda los 11,5 años.
¿Qué quiere decir esto? Según análisis de los fabricantes, el desgaste de las piezas comienza a acusarse después de los 10 años de uso. Las piezas móviles como engranajes, correas, articulaciones y mecanismos metálicos sufren desgastes importantes. Adicionalmente, el motor y la transmisión comienzan a dar señales de averías y necesidades de mantenimiento después de los 300 mil kilómetros recorridos.
Por ende, un coche con más años de funcionamiento tiene un riesgo mayor a sufrir accidentes por fallos en sus sistemas. Pero, existe un agravante a esta característica física de los coches y es la falta de mantenimiento.
Si no haces los mantenimientos preventivos a tiempo, el desgaste de tu coche puede acelerarse de manera exponencial. A pesar de tener una ITV favorable, los daños subyacentes y ocultos a las revisiones pueden tener efectos importantes en la seguridad de tu coche.
Por ello, es fundamental entender que cada año que suma tu coche debe hacer del mantenimiento una tarea más frecuente y acuciosa. Especialmente, en lo que se refiere a los sistemas más susceptibles a desgaste como frenos, neumáticos, amortiguación, dirección, transmisión y motor.
El Reglamento de Circulación y todas las leyes de tráfico son muy claras en cuanto a la obligatoriedad de tener un seguro de responsabilidad civil. Esta póliza cubre cualquier daño material producido en un accidente sobre propiedades y personas. Y en este sentido, la Ley de Responsabilidad Civil y Seguro no hace distinciones o excepciones en cuanto a la antigüedad de un coche.
Pero, el asunto cambia radicalmente cuando quieres asegurar a todo riesgo un coche con una determinada antigüedad. Para muchas aseguradoras, los coches más antiguos representan un riesgo mayúsculo y por lo tanto, suelen rechazarlos. En los casos de encontrar una póliza que acepte tu coche más antiguo, muchas veces, la prima es tan alta que las hace muy difíciles de pagar.
Por esta razón, existe una especie de vacío de protección para algunos coches cuya antigüedad es mayor a los 15 años. Si bien es cierto que existen pólizas para coches clásicos, estas están más enfocadas a coches históricos o de colección. Entonces, surge una duda lógica:
La respuesta está en un tipo de póliza especial que tienen algunas empresas de seguros para coches de 15 años o más. Estas pólizas, suelen ser un poco más difíciles de contratar pues dependen de una revisión mecánica y algunos requisitos especiales. Adicionalmente, suelen tener una prima adicional por la antigüedad que se hace mayor en la medida que tu coche envejece.
En la mayoría de estas pólizas, las coberturas se centran en la responsabilidad civil y pérdida total por incendio o robo. En otras empresas se hace una cobertura especial para lunas, daños de carrocería o incluso a todo riesgo con franquicia. Encontrar estas pólizas es bastante complejo pero con la ayuda de nuestra comparador de seguros de coche, podrás verlas en muy pocos minutos.
Con sólo incluir algunos datos básicos que incluyen la fecha de matriculación de tu coche, te daremos todas las pólizas disponibles. Allí podrás comparar precios, servicios y coberturas para tomar la mejor decisión para ti.
La DGT considera que cualquier vehículo con una antigüedad mayor a 30 años debe ser clasificado como vehículo histórico. Esta clasificación tiene algunas condiciones específicas. Una de las más importantes es que no haya sufrido modificaciones en motor, frenos, dirección, suspensión o carrocería.
Asegurar este tipo de vehículos suele ser relativamente sencillo y existen muchas pólizas para coches clásicos en el mercado actual. Sin embargo, debes saber que suelen ser pólizas un poco más costosas que las pólizas de coches nuevos.
La DGT establece que un coche puede pasar las revisiones con una antigüedad de hasta 45 años. Sin embargo, es fundamental saber que un coche mayor a 30 años se considera como histórico y tiene parámetros de inspección diferentes.
Normalmente si. Las aseguradoras consideran que un coche de más de 15 años tiene un riesgo inherente que lo hace más susceptible a siniestros. Por ello, suelen cobrar una prima especial por la antigüedad que las hace más costosas que otros tipos de pólizas.
Si las reformas cambian la estructura del coche, el motor, frenos, transmisión o dirección deben ser homologados. De todos modos, siempre recomendamos revisar el Manual de Reformas del Ministerio de Industria y Comercio para comprobar cuáles son las reformas sujetas a homologación.
https://itv.com.es/pasar-la-itv-que-miran
https://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-2003-23514
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