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en reseñas de GoogleEl protocolo PAS significa tres palabras: Proteger, Avisar y Socorrer. Este es el protocolo que se debe adoptar si te ves involucrado en un accidente para ayudar a los afectados. El objetivo de estas pautas es reducir el número de fallecidos en accidentes de tráfico, que suelen ocurrir en los primeros minutos.
Es una forma de reaccionar ante un accidente ordenada y eficaz. Entre el 30% y el 50% de los fallecimientos en un accidente se suelen producir de forma inmediata o en los primeros cinco minutos tras ocurrir el siniestro. Los primeros auxilios en forma del protocolo PAS, pueden ser esenciales para salvar vidas.
Las hemorragias y los problemas respiratorios, que obstruyen las vías aéreas, son las causas mayoritarias de las lesiones y la mortalidad cuando ocurre un accidente. Lo aconsejable es que la atención sanitaria no tarde en llegar más de 15 minutos. Esto aumenta las posibilidades de supervivencia. Pero, hasta que esa atención llega, es posible hacer cosas para ayudar a los heridos, si se da la circunstancia de que eres la primera o una de las primeras personas en llegar al lugar de los hechos. La actuación que adoptes con los heridos es crucial hasta que llegue la ambulancia.
La conducta PAS es una guía para actuar que recomiendan los profesionales sanitarios, para atender a los heridos en un accidente de tráfico. Las siglas de PAS significan: Proteger el lugar del accidente, Avisar a los servicios de emergencia y Socorrer a las víctimas. Proteger es lo primero que hay que hacer y significa que hay que evitar que el accidente pueda volverse todavía más grave, porque, por ejemplo, se produzca un choque en cadena.
Sin embargo, para atender a los heridos en un siniestro es importante que las personas que lo tengan algo de experiencia en rescates, porque, de lo contrario, pueden ellos mismos convertirse en víctimas, salvo si se trata de un incendio o una parada cardio respiratoria, que obligan a actuar con celeridad.
Por eso, proteger implica señalizar adecuadamente la zona del siniestro, poner balizas de emergencia V16 y triángulos. De esta forma se evita que los coches que pasan por ese carril en ese momento puedan atropellar o golpear a los afectados. Avisar implica que hay que ponerse en contacto, a la mayor brevedad, con los servicios de emergencia ya sean sanitarios, Guardia Civil o Policía. El número de emergencias en España es el 112.
Lo primero que debes hacer es comprobar, en la medida de lo posible, la gravedad de las quemaduras que sufre el accidentado.
Las quemaduras pueden ser de primer, segundo o tercer grado. Hay que retirar a la víctima del foco del incendio y sofocar las llamas que tenga encima cubriendo al afectado con una manta o haciendo que ruede por el suelo. Es importante que el herido con llamas no corra y no manipular la zona afectada hasta que lleguen los sanitarios. Tampoco hay que utilizar extintores sobre la víctima.
Según la Ley, los primeros en llegar son los que deben auxiliar a los accidentados. Aunque sean otros conductores, deben auxiliar a la víctima. Negarse a prestar auxilio es un delito de omisión al deber de socorro, castigado penalmente. Si se puede ayudar a una víctima sin riesgo para uno mismo y no se hace, se podrá ser castigado con una pena de multa de tres a doce meses.
Lo mismo ocurre si uno no pide ayuda, en caso de no ser capaz de auxiliar. Si el responsable del accidente no presta auxilio puede ser castigado con una pena de prisión de seis a 18 meses. Si el accidente se debe a una acción imprudente, la pena de prisión será de seis meses a cuatro años.
La Ley de Tráfico añade que si uno se ve involucrado en un accidente o es testigo de uno “está obligado a auxiliar o a pedir auxilio” o a prestar su colaboración. Y, si lo conoce, a poner en práctica el protocolo PAS, que lo que trata es de minimizar los efectos del accidente.
Ante todo, hay que mantener la calma. De no ser así, la persona que intenta ayudar podría cometer graves errores que podrían agravar el estado de la víctima o causar incluso su fallecimiento. Si pasas cerca de un accidente, debes aparcar tu vehículo en un lugar alejado para no interferir, colocarse un chaleco reflectante para que te vean otros conductores que pasen por el lugar, con lo que evitarás ser atropellado.
Se debe encender las luces de emergencia del coche y, si es de noche, las de posición. A continuación, hay que señalizar la zona con triángulos, uno delante del coche accidentado y otro detrás, a una distancia de al menos 50 metros. No se debe fumar en el lugar del siniestro, para evitar que algún líquido inflamable provoque un incendio
Una vez señalizada la zona y protegidos los accidentados, el siguiente paso es avisar a los servicios de emergencia. En España, se debe llamar al 112: en este número se puede solicitar asistencia médica y comunicar con protección civil, bomberos o policía. Al hacer la llamada, hay que identificarse y explicar con calma y precisión lo ocurrido y señalar la ubicación exacta del accidente y cualquier información que pueda ayudar a resolver la situación. Si la llamada al 112 se interrumpe, ellos mismos la devolverán al comunicante al poco tiempo, para que pueda seguir explicando la situación.
Si la víctima está consciente, es muy importante hablarle y tranquilizarla. Bajo ningún concepto hay que dejarla sola. Tampoco le des de comer o beber. Y si está atrapada en el interior del coche, no hay que sacar a la persona fuera, porque la manipulación podría causarle la muerte, salvo si su vida corre peligro, por una parada cardiorrespiratoria o un incendio o riesgo de explosión.
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Si atender a una víctima de accidente implica un riesgo para uno mismo o las personas que se encuentran con uno, esto no se considera omisión del deber de socorro. Por tanto, no es ningún delito protegerse a uno mismo. Esto no impide, sin embargo, ponerse en contacto con los equipos de emergencia lo antes posible, porque, de lo contrario, se incurre en el delito de omisión del deber de socorro.
El protocolo Pas es un acrónimo formado por las palabras Proteger, Avisar y Socorrer. Indica la manera en la que hay que ayudar en un accidente de tráfico con víctimas. El objetivo es reducir el número de fallecimientos.
Lo primero que hay que hacer es proteger el lugar del accidente, señalándole con triángulos de emergencia, evitando, por ejemplo, un choque en cadena. Luego, hay que avisar a los equipos de emergencia, y finalmente, socorrer a los heridos, de forma rápida y eficaz.
Conviene tener nociones de primeros auxilios para ser más preciso y eficaz, pero hay algunas cosas que un testigo puede hacer, como alejar a las víctimas del vehículo si hay riesgo de incendio o explosión. No auxiliar puede ser un delito de omisión de socorro, que puede castigarse con hasta 18 meses de prisión.
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