ArpemGuías Puntos de recarga de coches eléctricos: ¿Asignatura pendiente en España?
Puntos de recarga de coches eléctricos: ¿Asignatura pendiente en España?
Febrero 25, 2024
Agus J. Gutierrez
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El coche eléctrico ha revolucionado la movilidad sostenible en el mundo entero. Cada vez más personas están convencidas de sus beneficios en términos de ahorro y cuidado del medio ambiente. De hecho, la UE ha creado planes de subvenciones que son administrados por el Gobierno español. Pero, ¿cómo estamos en términos de disponibilidad y suficiencia de puntos de recarga públicos? Descubre aquí la situación actual en España.
Analizado desde el punto de vista práctico, el coche eléctrico es una gran solución al problema de la sostenibilidad. Además, el ahorro en combustible es significativo y el confort es innegable.
A pesar de que existen infinitas ventajas, el coche eléctrico no parece convencer a todos por igual. Si aún tienes dudas sobre su eficacia, he aquí algunas de las razones prácticas que esgrimen quienes ya han comprado un coche eléctrico.
Una de las primeras ventajas del coche eléctrico es el ahorro económico que ofrece en comparación con los vehículos tradicionales de combustión interna. La electricidad suele ser más asequible que la gasolina y el diésel con una menor volatilidad en los precios.
Lógicamente, no quiere decir que este gasto se suprima al 100% o que la electricidad sea gratuita. No obstante, los conductores de coches eléctricos aseguran que sus presupuestos se han optimizado desde que usan un coche eléctrico.
Experiencia de conducción silenciosa y cómoda
La conducción eléctrica suele ser mucho más tranquila, suave, sin ruidos y con mayor confort. Primero, la ausencia de ruidos del motor y la suavidad en la aceleración dan una experiencia de conducción única. Asimismo, las tecnologías de motorización innovadoras contribuyen a un viaje cómodo y libre de estrés.
Reducción de emisiones y contribución al medio ambiente
El impacto ambiental positivo de los coches eléctricos es quizá, su ventaja más conocida. La eliminación de emisiones del escape y la transición hacia fuentes de energía renovable contribuyen a la lucha contra el cambio climático y preservan la calidad del aire.
De hecho, la UE se ha planteado un entorno libre de vehículos de combustión en el 2035. Aunque hay países que se oponen férreamente a este plan, países como España se han unido a esta cruzada. Otra cosa es, como veremos más adelante, la puesta en práctica de los elementos infraestructurales necesarios para lograrlo.
Subvenciones e incentivos fiscales
La UE se ha planteado con los Fondos Next Generation, romper las barreras económicas para la compra de vehículos eléctricos. En España, estos fondos se unen al plan MOVES III que crea ayudas especiales para el crecimiento del parque automotor eléctrico.
En la actualidad, la compra de coches eléctricos se ha duplicado en relación a años anteriores por varias razones. La demanda en aumento ha creado una mayor oferta y, a su vez, una reducción del precio. Pero además, los subsidios estatales han permitido a muchas personas adquirir este tipo de vehículos.
Otro elemento que no puedes pasar desapercibido es el hecho de que el vehículo eléctrico poco a poco gana terreno en las ciudades más grandes. Si lees con atención nuestro artículo: “Qué restricciones tienen, en 2023, los coches con Etiqueta C”, verás que las restricciones aumentan para los coches de mayores emisiones.
Ante este panorama lleno de ventajas y beneficios, probablemente te preguntarás ¿por qué el coche eléctrico no está totalmente masificado? La respuesta se encuentra precisamente en los fallos de infraestructura que aún existen en España. Fíjate por qué.
España a la cola de la disponibilidad de puntos de recarga en Europa
España se ha unido a la meta europea de sustituir de forma paulatina el parque automotor de combustión por opciones más sostenibles. El coche eléctrico ha entrado en el punto de mira por considerarse la alternativa más económica y menos contaminante del momento.
Esta visión se enmarca dentro de la visión hacia la transición energética de la Unión Europea. Pero, a pesar de tener toda la intención de hacer los cambios, nuestro país aún dista mucho de ser potencia en términos de movilidad eléctrica.
Uno de los fallos o, mejor dicho, de carencias más importantes para la implantación de este plan es el tema infraestructural. En España, la disponibilidad de puntos de recarga eléctrica aún no cubre la totalidad del territorio.
Podríamos decir que en comparación con los puntos de suministros de combustible fósil, la disponibilidad de puntos de recarga es aún ínfima. En la actualidad, se estima que hay alrededor de 22 mil puntos de recarga públicos y privados en España. Una cifra que puede parecer elevada pero que debemos comparar con un territorio de más de 500 mil km2 de superficie.
Si comparamos a España con el resto de la UE, pronto veremos que estamos muy por debajo de las metas de movilidad sostenible. Aún hay en la península y los territorios insulares fuertes carencias de puntos de recarga. Mira cuál es la clasificación europea de disponibilidad de puntos eléctricos:
Los puntos eléctricos en Europa
España ocupa actualmente el séptimo lugar en cantidad de puntos de recarga. Pero además, hemos fallado en la distribución de los puntos pues la mayoría se concentra en las ciudades más importantes. De acuerdo con las estadísticas de puntos de recarga eléctricos, esta es la situación europea actual:
País
Nº de puntos de recarga eléctrica
Km2 de superficie
Nº de coches 100% eléctricos
Países Bajos
113.713
41.850
318.485
Alemania
83.560
357.592
1.300.000
Francia
83.317
643.801
605.791
Reino Unido
52.103
243.610
641.801
Suecia
24.352
528.447
205.212
Bélgica
23.508
30.688
37.619
España
22.472
506.030
183.961
Noruega
20.670
385.207
603.697
Austria
17.455
83.871
47.870
Suiza
10.851
41.285
78.200
Dinamarca
10.843
42.952
20.283
*fuente: Statista
Si analizas estos datos de forma objetiva, verás que Dinamarca, Países Bajos y Bélgica tienen la mayor densidad de puntos de recarga. Por otro lado, Alemania, Francia, Noruega y España, están peor parados en términos de disponibilidad.
Es decir, en países como Bélgica y Países Bajos, podríamos decir que hay un punto de recarga por cada 2-3 coches eléctricos. En nuestro país, hay un punto por cada 8 coches, una densidad muy baja si consideramos la distribución territorial. En un territorio 12 veces mayor, España tiene 5 veces menos puntos disponibles para recargar tu coche eléctrico que el líder europeo. Estas cifras pueden ser peores si analizamos cómo están distribuidos nuestros puntos.
¿Dónde están los puntos de recarga eléctrica en España?
Madrid, Barcelona, Valencia y las ciudades con mayor población acaparan más del 40% de los puntos de recarga. De hecho, entre Madrid y Barcelona, así como sus ciudades aledañas tienen más del 20% del total nacional.
Existen tramos de varios cientos de kilómetros en las carreteras nacionales con menos de 5 puntos en todo el recorrido.
Más del 70% de los puntos se circunscriben a zonas urbanas.
La ciudad con más puntos de recarga es Madrid con más de 1700 puntos urbanos y unos 200 puntos adicionales en un radio de 20 km. Barcelona le sigue con 1200 puntos en la ciudad y unos 60 puntos en sus ciudades satélite.
Esta distribución tan desigual es uno de los principales reclamos de los conductores de coches eléctricos. Para estos conductores, la diferencia de cantidad entre las gasolineras y puntos de recarga eléctricos reduce el uso del coche 100% eléctrico.
¿Qué está haciendo el Gobierno español para reducir esta brecha?
El Plan MOVES III es un ambicioso proyecto del ejecutivo para incentivar el uso del coche eléctrico como una alternativa sostenible. Este plan multidisciplinar abarca diferentes objetivos que van desde lo económico hasta lo estructural.
El Gobierno, apoyado en las Comunidades Autónomas, ha comenzado a conceder ayudas y subvenciones a aquellas personas que deseen pasarse a la movilidad eléctrica. Para ello, ha destinado grandes recursos a préstamos, subsidios y ayudas directas no reembolsables para la compra de vehículos.
Pero, incentivar la compra sin un plan de crecimiento de la infraestructura sería menos que eficiente. Por ello, se ha iniciado un proyecto de ampliación de las unidades de recarga que planea estar completado en el 2030. De forma gradual, el Gobierno y las CC.AA iniciarán la instalación de puntos que iniciarán en las vías de mayor circulación.La idea final es equiparar la disponibilidad de puntos de recarga con los de surtidores de gasolina y diésel. Un objetivo es instalar en cada estación de servicio, al menos, un surtidor eléctrico, especialmente en las zonas más alejadas del territorio.
Instalación de puntos de recarga privados. Pros y contras
Muchos conductores están tomando las riendas de su movilidad eléctrica y están instalando sus propios puntos de recarga. Alimentados con energía solar y con costes iniciales amortizables, la instalación de puntos privados crece diariamente. Hoy en día, se instalan cada vez más puntos de uso personal, en comunidades de vecinos, urbanizaciones, pueblos o empresas.
Esta instalación, aunque subvencionable, tiene una serie de costes iniciales, impuestos y obras civiles cuantiosas. He ahí una de sus desventajas, pero, fíjate en la sumatoria de ventajas y desventajas:
Ventajas de instalar un punto de recarga privado
Comodidad y accesibilidad: Con un punto de recarga en casa, experimentarás la comodidad de cargar tu coche eléctrico sin salir de tu propiedad. Esta accesibilidad las 24 horas del día, los 7 días de la semana, elimina la necesidad de depender de estaciones de carga públicas y se adapta perfectamente a tu rutina diaria.
Ahorro de tiempo y costes: Al tener tu propio punto de recarga, ahorras tiempo que de otro modo se gastaría en desplazarte a una estación de carga. Además, este enfoque puede traducirse en ahorros económicos a largo plazo, especialmente si usas fuentes de alimentación como la energía solar.
Mayor personalización: Un punto de recarga privado te da un mayor control sobre el proceso de carga. Desde la capacidad de programar horarios específicos hasta la posibilidad de adaptar la carga según tus necesidades.
Ahora, analiza algunas desventajas.
Desventajas de instalar un punto de recarga privado
Costes de instalación: Uno de los principales desafíos es el coste inicial asociado con la instalación de un punto de recarga en casa. Explorando opciones de subvenciones podrías reducir la inversión aunque, generalmente, es difícil eludir por completo algún desembolso.
Limitaciones para residentes de comunidades de vecinos: Para aquellos que residen en edificios o condominios, puede haber restricciones para la instalación de puntos de recarga privados. Tu comunidad debe aprobar por mayoría la instalación, algo que no siempre es sencillo.
Obras civiles y eléctricas: Es probable que debas hacer algunas adecuaciones estructurales y de suministro eléctrico en tu propiedad. Esto, evidentemente, suma costes, tiempo y recursos a la instalación.
Riesgos de robos o deterioro: Un punto de recarga privado es una propiedad que puede ser únicamente tuya o parte de la comunidad de vecinos. Eso quiere decir que cualquier daño, robo o deterioro deberá ser cubierto por ti.
En este último sentido, el auge de la instalación de puntos de recarga y la compra de coches eléctricos ha despertado las alarmas en las aseguradoras. Por ello, actualmente muchas empresas de seguro tienen pólizas especiales tanto para puntos eléctricos como cargadores privados. Analiza en nuestra comparador de seguros de coche estas alternativas, sus precios, condiciones y coberturas.
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El Plan Moves III cuenta con un fondo de 1200 millones de euros destinados a ayudas para la compra de vehículos eléctricos. Además, cuenta con una partida especial para la instalación de puntos de recarga alimentados de energía renovable como la solar. Consulta en la web sus requisitos, plazos y montos disponibles en tu localidad.
Los expertos de Arpem recomiendan
A pesar de la poca oferta de puntos de recarga, el Gobierno español planea incentivar la instalación de más puntos en todo el territorio. Estos planes hacen que el coche eléctrico siga siendo la alternativa más positiva en términos de sostenibilidad en el corto y largo plazo.
Analiza las alternativas de coches híbridos enchufables como una opción frente a la poca disponibilidad actual de puntos de recarga públicos.
Si vives en una comunidad de vecinos, existen muchas ayudas y subvenciones para la instalación de puntos privados. Estos costes iniciales son amortizables en términos de ahorro si los alimentas con energías autogeneradas como la solar.
En Resumen
España, en comparación con otros países de la UE, no está en la mejor posición en lo que se refiere a disponibilidad de puntos de recarga para el coche eléctrico.
Países como Bélgica o los Países Bajos tienen una densidad de más de 2 coches por cada punto eléctrico en una fracción del territorio español.
Actualmente hay más de 22 mil puntos públicos y privados concentrados principalmente en ciudades como Madrid o Barcelona. La administración planea aumentar esta disponibilidad en los próximos años y cubrir la totalidad del territorio.
Existen múltiples ventajas de instalar puntos de recarga en tu vivienda y tu comunidad de vecinos. Compara las ventajas y desventajas como una opción frente a la baja disponibilidad de puntos públicos en tu localidad.
FAQ
¿Puedo contratar una póliza específica para mi coche eléctrico?
Si. De hecho, muchas empresas han diseñado pólizas exclusivas para coches eléctricos con coberturas y servicios especiales. Consulta en nuestra herramienta de comparación los precios y coberturas.
¿Hay servicios de asistencia en carretera si me quedo sin batería?
Los servicios de asistencia en carretera de las pólizas para coches eléctricos incluyen el servicio de recarga de batería y traslado en grúa. No todas las pólizas son iguales y/o tienen los mismos servicios. Lo mejor es analizar cada una por separado y hacer una comparativa.
¿Puedo asegurar el cargador de mi coche?
Si, las pólizas de cobertura para coches eléctricos de muchas aseguradoras incluye el cargador de tu coche. En algunas pólizas puedes asegurarlo por robo, pérdida o daños en accidentes.
Soy redactor desde hace más de 15 años. Mi especialidad está en el mundo de los servicios y muy especialmente, en el sector asegurador y financiero. Mis textos tratan de informar desde una óptica amena, fluida y siempre pensando en los beneficios del lector como objetivo de cada artículo. Arpem me ha dado la oportunidad de trabajar con personas que comparten mi visión sobre el bienestar del cliente como único propósito. Aquí he encontrado esa combinación única de pasión, compromiso y entrega en cada faceta del servicio.
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