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En un accidente de tráfico, las consecuencias son impredecibles e incluso una leve colisión puede tener efectos negativos para ti. Una de estas consecuencias es romper tus gafas correctivas por el impacto. El seguro de responsabilidad civil del coche culpable se hace responsable de cualquier objeto que se rompa o deteriore a consecuencia del accidente. Pero, ¿tu seguro de coche cubre la reparación o sustitución de tus gafas? Sigue leyendo y descúbrelo.
Dimensionar las consecuencias de un accidente de tráfico es algo muy complejo. En cualquier colisión, incluso las más leves, puede haber daños físicos y personales importantes más allá del daño a tu vehículo. Este es el caso de las gafas correctivas. Estos instrumentos son muy importantes para aquellos conductores con defectos visuales y que necesitan corrección.
Las gafas se componen, por lo general, de un par de lentes que se sujetan mediante un marco o montura que permiten su uso cómodo y seguro. Pero, siendo tanto los cristales como la montura, elementos frágiles, un pequeño impacto puede romperlas o deteriorarlas significativamente. A menudo, suelen caerse o golpearse durante el impacto y consecuentemente, dañarse de forma definitiva.
El seguro de responsabilidad civil, el seguro obligatorio para todos los vehículos en España, contempla esta situación de forma universal. Es decir, dentro del listado de daños a las propiedades, vehículos y personas, los seguros a terceros cubren las reparaciones de objetos afectados por el accidente.
Fíjate cómo las pólizas de responsabilidad civil de vehículos cubren daños a terceros diferentes a las reparaciones de coches. Esto incluye, por supuesto, el daño de gafas y otros objetos personales.
En términos sencillos, la responsabilidad civil de vehículos es la garantía que ofrece implícitamente cada conductor para cubrir los daños causados por sus vehículos. Es una obligación añadida en la que un propietario y/o conductor pagará cualquier lesión y daño directo o indirecto a personas y propiedades ajenas.
Es por esta razón que los seguros a terceros son la cobertura mínima obligatoria de todos los vehículos en España. Esta póliza se encarga de cubrir los daños personales y materiales que el conductor causante del accidente pueda ocasionar a terceros. El seguro a terceros cubrirá los daños que hayas sufrido, incluyendo los daños a tus pertenencias personales, como tus gafas.
Las gafas están cubiertas bajo la categoría de daños materiales en la mayoría de las pólizas de responsabilidad civil. Si tus gafas se rompen en un accidente donde el otro conductor es el culpable, puedes reclamar la reparación o sustitución de las mismas.
Algunas aseguradoras exigen presentar pruebas de que las gafas estaban en uso en el momento del accidente y un presupuesto de reparación o el coste de reemplazo. Aun así, las aseguradoras suelen cubrir estos daños sin mayores problemas pero, bajo ciertos parámetros y límites preestablecidos. O sea, la aseguradora reemplaza o repara las gafas, pero bajo una determinada banda de precios. Además, considerando la depreciación del valor por el uso.
Por lo que, si usas gafas muy costosas, especiales o con elementos adicionales, lo más probable es que la aseguradora no cubra todo el valor. Lo que suele suceder es que las aseguradoras hacen una cobertura basándose en un baremo prefijado y suficiente para cubrir los requerimientos mínimos. Dicho esto, ¿tu seguro puede reemplazar o reparar tus gafas como parte de los daños propios? Fíjate qué dicen las aseguradoras.
Hoy en día, la ingeniería y el diseño de las gafas las hacen cada vez más resistentes y duraderas. Sin embargo, un hecho indiscutible es que las gafas son objetos frágiles y que no están hechas para soportar impactos o deformaciones exageradas. Es por esta razón que, en accidentes de tráfico, tus gafas pueden romperse o deteriorarse. Mira algunos de los daños más comunes en las gafas:
Todos estos daños pueden producir que las gafas no puedan sujetarse a tu cabeza y/o no cumplan su objetivo de corrección. Adicionalmente, los lentes sufren deformaciones del ángulo de refracción o distorsión que impide que puedas ver con claridad con ellas.
Por ende, un daño, incluso uno muy pequeño, puede hacer que las gafas pierdan su propósito y sean, para ti, una pérdida significativa. Es aquí cuando tu aseguradora puede ser tu aliado más importante.
Como ya has visto, si el accidente es causado por otro vehículo, el seguro a terceros del otro conductor se hará cargo de tus gafas. El seguro de responsabilidad civil cubre, sin mayores problemas, la pérdida o daño de objetos personales de los afectados. Pero, ¿qué pasa si no hay otro vehículo involucrado o tú eres el culpable del accidente?
En estos casos, tu seguro a todo riesgo puede hacerse cargo de la reparación o sustitución de tus gafas. Esto entra dentro del apartado de objetos personales de tu póliza. No obstante, esta cobertura no es estándar o está incluida en todas las pólizas de coche con cobertura de daños propios. Algunas aseguradoras no incluyen aquellos objetos que no hayan sido declarados de forma individual.
Por otro lado, algunos seguros de coche a todo riesgo con franquicia, directamente no incluyen estos objetos por ser considerados de bajo coste. Por lo que, en el caso de accidentes con rotura o daño a tus gafas, es posible que te encuentres con algunas desagradables sorpresas. Para evitar esto, la solución más idónea es comprobar cuáles son las condiciones especiales y exclusiones de tu póliza.
Así como en las pólizas a terceros, las aseguradoras no suelen hacer cobertura uno a uno. De esto hemos hablado antes en casos como la pérdida o robo de tu equipaje. Allí te explicamos que, aunque las pólizas incluyen la reposición de objetos personales, no siempre se hace al mismo valor del objeto. Las aseguradoras, a menudo, aplican coberturas estandarizadas, básicas y cerradas.
Un punto importante y que debes tener muy en cuenta es que una de las mayores sorpresas negativas es en algunos casos especiales. Dentro de ellos, el que mayores malestares crean en los conductores es cuando las gafas producen lesiones en tus ojos o en la cara. Fíjate cómo y qué cubre la póliza a todo riesgo.
En algunos desafortunados casos, la rotura de las gafas puede ser más grave que una pérdida material. Durante un impacto, la cabeza del conductor y/o sus ocupantes, puede chocar con el airbag o elementos fijos del coche. En estos casos, tanto los cristales como la montura de las gafas pueden producir lesiones en el globo ocular o cualquier parte del rostro.
Dada la fragilidad del órgano de la vista, las lesiones en uno o ambos ojos pueden ser muy graves. Estas lesiones pueden necesitar cirugía, tratamientos oftalmológicos o incluso, el uso de prótesis especiales. Por lo general, este tipo de tratamientos médicos suelen ser costosos y muy especializados.
Si estas lesiones se producen cuando otro vehículo ha sido culpable del accidente, podrás contar con la cobertura de su seguro a terceros. Pero, lamentablemente, tu seguro a todo riesgo puede darte una mala noticia cuando eres el culpable o no hay vehículos involucrados. El seguro a todo riesgo no cubre per se las lesiones personales y los tratamientos médicos del conductor y ocupantes. Es decir, sólo cubre los daños al vehículo.
Por ello, la mejor solución para cubrir este tipo de lesiones es contratar un Seguro del Conductor. Este tipo de coberturas puede estar incluida en tu seguro a todo riesgo, pero no es común a todas las aseguradoras. Para algunas empresas, este seguro debe contratarse de forma individual y bajo ciertos elementos. Ahora bien, ¿cómo son las coberturas de gafas de los seguros de coche? Mira algunas aseguradoras que lo ofrecen.
A lo largo de este artículo, te hemos explicado que tus gafas pueden ser cubiertas por el seguro a terceros del coche culpable del accidente. Sin embargo, también has visto que tu seguro a todo riesgo puede no incluir esta cobertura de forma generalizada.
Debido a ello, muchas aseguradoras incluyen la cobertura de gafas como parte de sus coberturas adicionales y servicios añadidos. Esta cobertura cubre la reparación y/o sustitución de las gafas si se han dañado en un accidente. No todas las aseguradoras tienen esta cobertura y no todas tienen las mismas condiciones. Estas son algunas de las aseguradoras con cobertura de gafas en sus pólizas a todo riesgo:
Obviamente, estas coberturas tienen sus propias cláusulas de exclusión y ciertos parámetros de reposición y/o sustitución. Generalmente, las aseguradoras ofrecen una cobertura cerrada y con montos límites. Pero, sin duda, es una garantía adicional que será de gran ayuda en estos momentos. Del mismo modo, las aseguradoras que te hemos nombrado no son las únicas con estas coberturas. Por ende, es importante analizar la oferta de servicios de la mayor cantidad de aseguradoras. Fíjate cómo puedes hacerlo de forma sencilla y rápida.
Si algo puede describir el mercado asegurador español, es su amplitud en empresas, productos y servicios. Este mercado tan amplio puede jugar en tu contra si deseas analizar todas las ofertas disponibles en la actualidad. Ir una a una por todas las compañías de seguros, es una tarea prácticamente imposible.
Por ello, la mejor forma de analizar el mercado actual y encontrar las pólizas y coberturas que necesitas, es hacerlo de forma automatizada. Y para ello, la mejor solución es usar nuestra herramienta de comparación de seguros de coche. En pocos minutos y sin moverte de casa, podrás analizar todas las aseguradoras y tipos de seguro del mercado actual.
Podrás personalizar al 100% tus búsquedas y, de forma totalmente gratuita, obtener un listado de las mejores opciones para ti. Por si fuera poco, si tienes dudas o necesitas ayuda, tendrás a tu disposición a los mejores asesores profesionales del sector seguros de España.
Actualmente, muchas ópticas ofrecen como parte de sus servicios la garantía total de sus lentes y monturas. Algunas de ellas, te reparan o sustituyen de manera automática cualquier daño que tengas en los cristales o las monturas sin coste adicional. En algunos casos, con tu compra, la óptica puede ofrecerte un seguro que suele ser muy económico en comparación con unas gafas nuevas. Esta cobertura es ideal para aquellas personas que pierden o rompen sus gafas con más frecuencia.
Prácticamente ninguna entidad aseguradora ofrece una cobertura directa para la rotura de tus gafas. Lo normal es que necesites un seguro específico para tus gafas..
No todas las compañías tienen los mismos límites. Algunas cubren las gafas graduadas, pero no las gafas de sol. Otras solo asumen el gasto de las lentes, pero no de la montura. Conviene consultar las condciones generales o directamente a tu compañía aseguradora.
Lógicamente, la compañía querrá tener la certeza de que tus gafas se han roto en un incidente de tráfico. Además, deberás presentar la factura original de compra, o al menos un duplicado de la misma.
https://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-2004-18911
https://www.dgt.es/comunicacion/noticias/recomendaciones-para-conductores-con-problemas-de-vision-/
Escribe contenidos de seguros de coche para Arpem.com desde hace más de 10 años. Ha participado activamente en la elaboración de una herramienta de comparación de coberturas de seguros de coche y moto muy útil para guiar a los usuarios en la elección del seguro ideal. En sus artículos ayuda a comprender las coberturas más interesantes de las que se compone una póliza y, además, prepara cálculos de precios como ejemplo para que los conductores conozcan la situación del mercado de seguros.
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