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en reseñas de GooglePara muchos conductores su vehículo es su herramienta de trabajo o lo utilizan muy a menudo por razones familiares, por ejemplo, por eso para ellos es imprescindible contar con una póliza que contemple la posibilidad de proporcionarles un vehículo de sustitución. Sin embargo, el coche de sustitución es una cobertura que no está siempre incluida en las pólizas. No es una cobertura básica o “de serie” en las modalidades más completas de todo riesgo. Pero, además, cuando un seguro la incluye, lo hace con ciertas limitaciones que es muy importante tener en cuenta. Lo habitual es que esta cobertura se ofrezca de manera opcional al contratar el seguro del coche.
El coche de sustitución no está considerado como una cobertura esencial, al menos no en la mayoría de los casos. Por esta razón, los criterios con los que cada compañía la incluye en sus pólizas varían. Varían también las condiciones, el tiempo o el tipo de siniestro que ha sufrido el asegurado a la hora de solicitarlo.
Por este motivo, es crucial examinar detenidamente las condiciones de cada póliza y compararlas con otras si esta cobertura es esencial para nosotros. Las compañías generalmente no incluyen esta cobertura de forma estándar en sus pólizas más completas, ni siquiera en el seguro a Terceros Ampliado o el Todo Riesgo, y en caso de hacerlo, establecen una serie de condiciones.
En la mayoría de los casos, esta cobertura es opcional, incluso en las pólizas más completas, a diferencia de otros servicios que se incluyen como parte de la asistencia en carretera, como quedarse sin combustible, perder las llaves del coche o sufrir un pinchazo durante un viaje o el remolque del vehículo. Esto significa que es necesario añadirla por separado a la póliza y pagar un coste adicional para poder beneficiarse de ella.
Un coche de sustitución resulta muy conveniente para aquellas personas que necesiten desplazarse diariamente con su vehículo y no dispongan de otro medio de transporte. Sin embargo, cada compañía aseguradora determina las circunstancias en las que se proporciona dicho coche. Las situaciones más comunes para solicitarlo son en caso de accidente y robo, aunque algunas compañías también lo ofrecen en caso de avería, aunque suelen establecer ciertas condiciones, especialmente en cuanto al tiempo de cobertura, con un límite de días estipulado.
En este aspecto, si estás interesado en un seguro con cobertura de vehículo de alquiler, entérate de la cantidad de días que la compañía te ofrecerá el vehículo de sustitución, ya que si es una cantidad muy limitada, quizás no te compense pagar por ello.
Una cosa es ser víctima de un robo y otra sufrir un accidente. En el último caso, el coche de sustitución es necesario durante más tiempo. Por eso varía mucho el periodo de utilización de un coche de sustitución.
Algunas compañías ofrecen el servicio hasta quince días si se ha producido un accidente y hasta un mes o más si te han robado el coche, pero otras lo limitan a menos días. Si la razón por la que necesitas un coche de sustitución es una avería, suelen ser las horas de mano de obra (y su precio) y el tiempo que el coche debe permanecer en el taller las que marcan el tiempo que puedes disfrutar del coche de sustitución.
Además, las aseguradoras suelen establecer un mínimo de horas de reparación para aceptar la entrega del coche de sustitución, por lo que si no supera ese mínimo, no te harán entrega del vehículo y tendrás que esperar a que reparen el coche asegurado..
A continuación, repasamos algunas pólizas que ofrecen esta cobertura:
| Vehículo de sustitución | Allianz | Axa | Direct | Pelayo | Reale |
|---|---|---|---|---|---|
| Contratación | Incluida en talleres concertados | Opcional | Opcional | Opcional | Opcional |
| En caso de robo | Hasta 30 días | Hasta 30 días | Hasta 30 días | Hasta 30 días | Hasta 30 días |
| en caso de accidente o incendio | Hasta 15 días | Hasta 7 días | Hasta 7 días | Hasta 7 días | Hasta 7 días |
En efecto, el uso de un coche de sustitución puede estar sujeto a la utilización de talleres oficiales o concertados con la compañía, en caso de accidente o avería. Suelen ser los talleres los que facilitan este servicio: en este caso, se llama vehículo de cortesía. Este es el único caso en el que algunas compañías incluyen de serie la cobertura de vehículo de sustitución.
El problema es que, en ocasiones, el taller concertado no dispone de vehículos en ese momento y debes esperar a que les devuelvan uno para que te lo entreguen. Lo mejor es que te facilitan el coche de sustitución sin este requisito y lo hagan a través de una empresa externa de alquiler de vehículos.
Algunas aseguradoras ponen muchas facilidades a la hora de proporcionar este servicio, pero lo que hacen es limitarlo a un número de horas o de días al año o a un número de solicitudes, que pueden ser dos o tres. Algunas compañías que incluyen el vehículo de sustitución contemplan también una indemnización, si no les es posible proporcionar este servicio, si no hay vehículos disponibles. Esta cantidad debe permitirte buscar una alternativa por tu cuenta.
Habitualmente, el coche de sustitución no se consigue de forma inmediata. Por lo general, el vehículo o la indemnización en su lugar tardan algún tiempo. Si el coche está en el taller, por un accidente, la compañía necesita conocer su estado y las reparaciones necesarias y negociarlas. Si se ha producido un robo, las compañías necesitan tener la denuncia para ofrecer el coche por el número de días establecido en el contrato.
¿Están obligados los talleres a proporcionar un coche de sustitución?
No están obligados a hacerlo mientras dura una reparación. Una opción que ofrecen algunos talleres es la posibilidad de un alquiler a precios más bajos. Proporcionar un coche de sustitución les sale caro a los talleres y, por esta razón, suelen ofrecerlo sólo a clientes especiales o cuando la reparación se va a demorar mucho.
Si tu vehículo está en garantía, ni el taller, ni la aseguradora están obligados a proporcionar un coche de sustitución. Esta es una decisión discrecional, tanto por parte de la marca de tu vehículo, como por parte del taller, incluso si la reparación supone un segundo arreglo tras una reparación previa en el mismo taller.
Habitualmente las compañías no lo consideran así y hay que contratar aparte esta cobertura. Las aseguradoras suelen incluirla en los seguros más completos, como el a todo riesgo, aunque no siempre. Cada compañía fija sus criterios.
Los casos más habituales son el robo y el accidente. Algunas aseguradoras hacen diferencias entre el robo parcial y el robo total y otras incluyen algunos supuestos especiales, como sufrir un pinchazo o ser víctima de acto de vandalismo.
Cuando la razón para solicitarlo es un robo, se suele poder utilizar durante un mes, pero hay que presentar previamente la denuncia. Si se trata de un accidente, suelen ser quince días. Si se trata de una avería, dependerá de las horas de reparación. Las compañías suelen fijar unos máximos y unos mínimos.
En efecto, el uso de un coche de sustitución puede estar sujeto a la utilización de talleres oficiales o concertados con la compañía, en caso de accidente o avería.
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