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Consigue ahora el 40% de reembolsoEl motor de tu coche es una pieza muy pesada y que ejerce una fuerza impresionante que se traduce en una vibración continua y muy potente. Estas vibraciones, sumadas a los movimientos de la carretera, frenadas y arranques, pueden crear movimientos no deseados en el motor. Sin unos tacos resistentes y flexibles al mismo tiempo, el motor sufriría daños inestimables. Hoy te mostraremos qué son los tacos del motor y cuáles son sus averías más frecuentes.
Todo en tu coche importa, no hay piezas de más o que estén allí como decoración o que puedan suprimirse. Como un sistema que funciona de manera perfecta, todo debe estar en la más absoluta sincronía. Y, no sólo se trata de las piezas y su función. La ingeniería automotriz ha diseñado todo con un lugar, un ángulo y una posición muy específica.
Cualquier movimiento o desplazamiento de alguna pieza tiene repercusiones en el resto del sistema. Ahora, podrás imaginar que el motor, el corazón de tu coche, debe ser la pieza con mayor cuidado en su fijación adecuada. El motor produce una tremenda fuerza debido a las explosiones de la combustión y al movimiento violento de todas sus partes.
Un motor que no esté bien sujeto podría salirse de su posición tan sólo un par de minutos después de su encendido. Todo ello, sin contar que está en continuo desplazamiento por vías irregulares con subidas, bajadas, frenadas y aceleración.
Es allí cuando los tacos del motor toman relevancia. Estos pequeños y aparentemente insignificantes componentes permiten la sujeción del motor de manera eficaz. Pero además, le aportan amortiguación para que las propias vibraciones del motor sean aisladas de manera súper eficiente.
Los tacos del motor son pequeñas piezas, generalmente fabricadas a partir de gomas especiales y metales resistentes. Su función es dar estabilidad, firmeza, amortiguación y sujeción en su posición al motor. Mediante la unión al chasis, los tacos del motor permiten que el motor pueda trabajar de forma estable y sin afectar a otras piezas.
En la industria automotriz, el diseño de cada coche es único y rara vez la industria recicla diseños para otros modelos. Sin embargo, cada fabricante de coches tiene una especie de sello de ingeniería, una metodología que da identidad a sus creaciones. Por ello, para un mecánico experimentado, es fácil distinguir que un motor es de una marca o de una escuela determinada.
Es decir, los coches americanos, europeos y asiáticos tienen elementos únicos pero que se repiten en las diferentes marcas de manera distintiva. Uno de los elementos más destacables es el diseño del motor. La disposición del motor dentro del capó varía entre escuelas de ingeniería y por ende, los métodos de sujeción.
Como podrás intuir, al existir diferentes visiones del diseño de motores, hay también, diferentes formas de diseñar los tacos del motor. Algunas marcas prefieren hacer tacos con mayores componentes de goma y otras le dan más importancia a la composición acerada.
Aún así, los tacos del motor tienen en común sus objetivos de fijación eficaz del motor al chasis. A menudo, los tacos se encuentran en la parte inferior del motor, lo que permite a los mecánicos acceder a ellas desde el suelo.
Pero, en otros casos, los tacos se fijan a los laterales del chasis en una zona que se ha dispuesto exclusivamente para sostener al motor. En términos generales, para un mecánico, ubicar los tacos del motor es una tarea relativamente sencilla.
Esta es una pregunta muy lógica. Cabría esperar que los elementos que mantienen un motor de varios cientos de kilos y que produce tanta potencia, sean super resistentes.
En el caso de los tacos del motor se aplica el viejo dicho que dice que “en el pecado está la penitencia”. Verás, los tacos del motor son elementos de sujeción y amortiguación que deben soportar tensiones elevadas con movimientos muy violentos. Por ende, sus partes están diseñadas para dar, al mismo tiempo, firmeza y flexibilidad.
Todo este estrés físico produce desgastes en la pieza que está fabricada con una vida útil determinada. Las partes de goma del taco van perdiendo flexibilidad y resiliencia, lo que se traduce en una reducción progresiva de su capacidad de soporte. No obstante, existen una serie de elementos externos e internos que pueden acelerar los fallos en los tacos del motor. Mira los más comunes.
Es complicado pensar que una pieza hecha para resistir tenga el mínimo riesgo de romperse o deteriorarse. Es totalmente lógico pensar que una pieza hecha para soportar grandes pesos y fuerzas extremas, no tenga vulnerabilidades.
En el caso de los tacos del motor, cualquier especialista te dirá que es un buen síntoma que los tacos se hayan desgastado por envejecimiento. Aunque parezca contradictorio, esto será una señal de que el motor no ha tenido movimientos inesperados y que ha trabajado de forma suave.
No obstante, existen elementos internos y externos que pueden acelerar la pérdida de vida útil de los tacos del motor. Estos ingredientes no esperados pueden causar daños irreversibles en los componentes de las bases del motor. A pesar de que hay decenas de orígenes para la avería de los tacos del motor, estas suelen ser las más encontradas por los talleres especializados:
Aceite, combustible, líquido refrigerante y tacos del motor, es una combinación incompatible. Si bajo el capó de tu coche hay algún tipo de pérdida de fluidos y llega a los elementos de goma de los tacos, se pueden producir desgastes acelerados.
La pérdida que más frecuentemente daña los tacos del motor son las de lubricantes del motor y/o transmisión. Los aceites de alta viscosidad del aceite del motor afectan de manera directa a las gomas de los tacos. Las hace perder resiliencia y por ende, capacidad de amortiguación.
Cuando se produce una colisión, todo el vehículo experimenta una fuerza inusual que puede desplazar la posición de los tacos del motor. Esta pérdida de estabilidad de la base del motor puede producir torsiones, roturas o averías graves.
A su vez, los volcamientos producen movimientos anormales y de gran tensión en los tacos del motor con efectos en su estabilidad. Adicionalmente, los daños en el chasis pueden producir una pérdida de la ubicación y ángulo de inclinación de los tacos.
Cuando se hacen trabajos de mecánica de gran envergadura, a veces, hay que manipular los tacos del motor para recolocar piezas. Si estos trabajos no llevan consigo un reposicionamiento adecuado de los tacos del motor, se pueden producir daños a largo plazo.
Los cambios del motor o cualquier pieza mayor como la caja de transmisión, pueden requerir un ajuste de las bases del motor. Por ello, los mecánicos experimentados suelen recomendar una sustitución de los tacos del motor como parte del trabajo.
En nuestro artículo: “Sobrecalentamiento de tu coche. Posibles causas y consecuencias” podrás ver algunas consecuencias de esta avería. El aumento intempestivo y violento de la temperatura interior puede deteriorar las gomas de los tacos del motor.
En algunos casos muy graves, el aumento de la temperatura puede llegar a fundir los elementos plásticos de los tacos del motor. Asimismo, se pueden crear torsiones del metal que afecten el soporte del motor.
Como has visto, las partes móviles y de goma de los tacos del motor sufren desgastes que se incrementan por la acumulación de polvo y agentes externos. De manera progresiva, la elasticidad de las gomas se va reduciendo y con ello, la capacidad de soportar los pesos y/o movimientos del motor.
Ahora bien, ¿cómo saber que los tacos del motor de tu coche tienen alguna avería? Fíjate en algunos de los síntomas más frecuentes para identificar daños en esta parte tan importante de tu coche.
A menos que seas mecánico o tengas un profundo conocimiento automotriz, la mayoría de los fallos de tu coche serán un absoluto misterio. Para la gran parte de los conductores, muchas averías pasan inadvertidas hasta que es demasiado tarde y el daño ha llegado a mayores. Para evitar reparaciones de gran tamaño con consecuencias negativas, te recomendamos prestar atención a los siguientes síntomas:
Si cada vez que caes en un bache o cualquier sobresalto en la vía, sientes ruidos de golpeteos puede ser un síntoma inequívoco. Los desajustes en los tacos del motor no hacen la función de sujeción adecuada del motor y las piezas mecánicas interiores. Por ende, cada movimiento pronunciado puede producir choques de las partes y crear ruidos inusuales.
Estos ruidos van incrementándose a medida que pasa el tiempo hasta generarse sólo con los cambios de marcha, frenadas o aceleración. Es fundamental acudir al taller a las primeras señales de sonidos fuera de lo normal.
Los desbalances de la estabilidad del motor pueden producir pérdida de ajuste, roturas o despegar mangueras, sellos o tapones de fluidos. La consecuencia puede ser la pérdida de fluidos importantes como el aceite del motor, caja de transmisión, refrigerante y otros como líquido de frenos.
Si debajo de tu coche notas charcos o manchas anormales, es fundamental que compruebes los niveles de fluidos. Este es un caso muy especial pues genera un espiral en el que las averías se agravan de manera rápida y progresiva.
Los tacos del motor defectuosos no sólo afectan la estabilidad del motor sino que pueden afectar a la caja de transmisión. Estos desajustes pueden crear desviaciones en los engranajes internos de la caja de cambios. Por ello, puedes sentir mayor dificultad para ingresar las marchas o ruidos anormales.
Debido a la pérdida de fluidos, las altas temperaturas de las piezas del motor pueden evaporar estos fluidos y producir olores desagradables. Estos olores son prácticamente imposibles de ignorar, sobre todo cuando se combinan con vapores o humos que salen por debajo del coche o del capó.
Hacer un mantenimiento adecuado de tu motor debe incluir una revisión periódica de los tacos del motor. En artículos previos puedes ver que estas revisiones no son costosas pero tienen un valor inestimable en ahorro de dinero y dolores de cabeza. Especialmente, cuando te ayudan a diagnosticar a tiempo averías que se acumulan y se agravan con el tiempo.
Asimismo, un mantenimiento adecuado te permitirá tener una mayor tranquilidad a la hora de pasar las inspecciones de la ITV y del seguro. En nuestra comparador de seguros de coche podrás ver como algunas pólizas exigen un mantenimiento continuo como parte de sus políticas y condiciones.
La caja de transmisión usa una serie de tacos o bases que le dan estabilidad y ayudan a mantener su posición. Trabajan de forma independiente a los tacos del motor y suelen tener los mismos riesgos de caducidad, inestabilidad por colisiones u otras averías. Es muy importante que revises su funcionamiento de forma periódica y preventiva.
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Aunque varía en términos del uso y tipo de coche, la mayoría de los mecánicos recomiendan una revisión/cambio preventivo a los 80 mil kilómetros.
El motor de un coche está sujeto al chasis por una serie de estructuras de alta resistencia que incluye los tacos del motor. El desprendimiento del motor es algo muy inusual y extraño pero no imposible. Lo que sí es más frecuente es la pérdida de estabilidad producto de colisiones, volcamientos y otros accidentes.
Los motores eléctricos son más ligeros y producen mínimas vibraciones por la ausencia de combustión. Sin embargo, necesitan tacos de motor como elemento de sujeción y amortiguación, por lo que usan un tipo de tacos especiales.
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