La importancia del seguro de decesos: qué es y qué cubre

Definición de un seguro de decesos

Un seguro de decesos está pensado para ayudar a los familiares de un fallecido con los trámites del velatorio, el entierro, el ataúd, la incineración, etc. Es un contrato que ayuda con los trámites burocráticos relacionados con el mero fallecimiento. 

El gasto medio de un entierro puede llegar a los 3000€, cifra que tendrán que pagar los familiares si la persona fallecida no tiene seguro. El seguro de decesos ayuda a paliar esta carga financiera corriendo con todos los gastos. La gran diferencia con otro tipo de seguros es que no existe una indemnización económica para los beneficiarios. 

Coberturas de un seguro de decesos

Los gastos de un entierro son variados, dependiendo también de las últimas voluntades de la persona que ha fallecido. Un seguro de decesos ayuda a que todo esté previsto según las preferencias personales. A continuación, verás algunas de las coberturas habituales de este tipo de pólizas. 

• Servicio fúnebre: en esta cobertura se incluye el féretro, el coche fúnebre, la inhumación o incineración, el sudario, sala de velatorio, acto religioso y lápida. 
• Nicho: suele estar cubierto el nicho temporal o la urna de incineración. 
• Flores: las flores son un símbolo de respeto en los entierros, el seguro de decesos, a veces, tiene la cobertura de algunas coronas incluidas. 
• Burocracia: los trámites administrativos suelen ser algo muy pesado tras la muerte de un ser querido, por eso, el seguro se encarga del papeleo. Aquí entraría la obtención del certificado de defunción, los trámites de la herencia, la solicitud de una pensión, la baja en la Seguridad Social, la baja en el libro de familia y otros trámites similares.
• Asistencia en viaje: esta cobertura suele ser adicional y es recomendable para aquellas personas que viajen de forma frecuente. Si el fallecido ha muerto lejos de su residencia, el seguro se encargaría de la repatriación y los posibles gastos médicos. 
• Repatriación: esta prestación está relacionada con la repatriación del cuerpo por cualquier tipo de muerte fuera de la residencia habitual. Aunque suele ser una cobertura que incluye territorio español, se puede contratar para asistencia en el extranjero. Una de sus grandes ventajas es que no solamente incluye la repatriación del cuerpo, sino que también se tiene en cuenta el traslado de un acompañante.
• Servicio psicológico: esta prestación también es adicional, pero puede ser de gran ayuda para ayudar a tus seres queridos en un momento tan complicado. 
• Asistencia digital: esta prestación extra es relativamente nueva. Se ha implementado en los últimos años debido a la presencia en internet. La asistencia digital se encarga de cosas tan variadas como la gestión del testamento online, la herencia digital y el borrado de redes sociales o huella digital en general. 

Como has podido leer, son muchas las prestaciones de un seguro de decesos. Por lo que si no tienes seguro de vida, este tipo de seguros puede ser una garantía que asegure un apoyo a tus familiares en caso de fallecimiento. Si estás buscando el mejor seguro para ti, puedes encontrarlo en el comparador de seguros de Arpem.com, es muy fácil y rápido. 

Diferencias entre un seguro de decesos y un seguro de vida

La diferencia principal entre un seguro de decesos y de vida es la indemnización que reciben los beneficiarios cuando se produce la muerte del asegurado. Es decir, en el seguro de vida hay un capital asegurado que reciben, habitualmente, los familiares. 

La muerte por cualquier causa es también una de las garantías del seguro de vida, que se refiere a que los beneficiarios recibirán el dinero por muerte de cualquier tipo. El dinero a percibir dependerá de lo estipulado en la póliza del fallecido. 

Una de las ventajas principales de un seguro de vida en comparación de un seguro de decesos es que también tiene la cobertura por invalidez o dependencia. Esto quiere decir que o bien los beneficiarios o el propio asegurado recibirían el capital asegurado si se produce un siniestro que provoque la invalidez total o parcial del contratante del seguro. 

La elección de elegir un seguro de decesos o un seguro de vida es personal y dependerá de las circunstancias y preferencias de uno mismo elegir uno u otro. No hay una póliza mejor que otra, sino que las hay que se adaptan mejor o peor a tus necesidades. 

Los expertos de Arpem recomiendan 

• Los gastos de un entierro pueden llegar a cifras desorbitadas que los familiares tienen que cubrir, hazlo todo más fácil contratando un seguro de decesos. 
• Si ya tienes un seguro de decesos, es importante que especifiques si deseas incineración o inhumación. Esto servirá para poder ayudar a tus familiares en un momento tan difícil. 
• Recuerda que tanto en un seguro de decesos como en un seguro de vida existen exclusiones, por lo que es recomendable que leas la póliza con mucha atención. 
• Si no te gusta la burocracia, seguramente a tu familia tampoco. Con un seguro de decesos estarás simplificando el papeleo y ayudando a tus seres queridos. 
• Si tienes gran presencia en la red y quieres que tu huella digital desaparezca tras tu muerte, puedes contratar una cobertura de asistencia digital. 
• La importancia del apoyo psicológico tras la muerte es algo esencial en algunos casos, sobre todo en pérdidas traumáticas. La cobertura de asistencia psicológica puede ser de gran ayuda para pasar el trance. 
• La elección de un seguro de vida o decesos es personal y circunstancial. Si no sabes cuál contratar, estudia detalladamente tu situación y pide ayuda si lo ves necesario.