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Consigue ahora el 40% de reembolsoSi todavía no sabes por qué deberías contar con un seguro de decesos, llamado comúnmente de muertos, este artículo es para ti. El bienestar de tu familia y de tus seres queridos puede tener un precio ínfimo al año, ¿quieres saber más? No te lo pierdas a continuación. Además, descubrirás las coberturas más originales que han llegado de la mano de las tecnologías 2.0. Esquelas online, borrado de la presencia en la red y mucho más. ¡Continúa leyendo!
Al contrario que los seguros de vida, en los seguros de decesos no se asegura un capital que vaya a ir destinado a unos beneficiarios, sino que se asegura un capital que cubra los servicios funerarios como tal.
Estos servicios varían su coste dependiendo de la localidad, ya que no cuestan lo mismo en unos lugares que en otros. Muchas aseguradoras revisan anualmente los costes de los servicios de sepelio para que la póliza de los asegurados no quede obsoleta.
La prima que se paga por un seguro de decesos varía según las necesidades de cada usuario, además del número de asegurados, porque se pueden hacer seguros que incluyan a miembros de una misma familia. El coste también vendrá determinado por la edad de cada uno de ellos.
Aunque en España es uno de los seguros más extendidos y que más contrata la población, hay curiosidades de este tipo de pólizas que no se conocen, como por ejemplo que tienen tres modalidades de prima; la natural o renovable, que aumenta cada año según cambian los precios de los servicios funerarios y la edad del asegurado, pago único; que se realiza mediante un único desembolso y prima nivelada; que tiene un coste similar durante toda la vida y solo se ve ligeramente aumentada por los cambios de los servicios del sepelio.
El cambio a lo digital también ha llegado a los seguros y el seguro de decesos no se ha quedado atrás. Entre las nuevas coberturas que puede incluir una póliza de estas características está el borrado de la presencia digital. Es decir, la eliminación de los correos electrónicos y las redes sociales del usuario. A esta cobertura se le añade una muy característica;, la atención psicológica. Como bien sabes, cuidar de la salud mental es tan importante como hacerlo de la física, por lo que se puede incluir asistencia psicológica para tus seres queridos para ayudarles a pasar el duro trance de la pérdida.
Otro de los servicios que ofrece contratar un seguro de muertos en pleno siglo XXI es la esquela funeraria online. ¿No sabes lo que es? Es un espacio en la red donde los seres queridos pueden despedirse de la persona fallecida. Para muchos, esto es de vital importancia, ya que, por temas de trabajo o distancia, hay personas que no pueden acudir presencialmente al lugar del entierro y este tipo de espacios permiten despedirse de su allegado.
Una persona de 40 años, puede encontrar seguros que varíen de entre 20€ a 70€ al año, pero ¿cuánto costaría un entierro de una persona que no dispone de seguro de muertos?
A continuación, verás algunos ejemplos de precios según datos recogidos de la OCU (Organización de Consumidores y de Usuarios):
Como ves, esta aproximación de precios, que puede variar según la localidad, muestra unos precios altos. Estos costes, en caso de que la persona fallecida no cuente con un seguro de decesos, deberán correr a cargo de la familia. Si todavía no sabes por qué deberías tener un seguro de muertos, quizá estas cifras te hayan despejado las ideas. Si no lo tienes claro, haz clic en Arpem.com y en unos minutos tendrás a tu disposición los mejores seguros a precios inigualables.
Los sarcófagos egipcios de la antigüedad estaban meticulosamente diseñados según el estatus social de la persona fallecida. Los faraones podían llegar a tener oro y piedras preciosas incrustadas, junto con pinturas jeroglíficas y símbolos protectores pintados al detalle para guiar al difunto en el más allá. Pero no solo eso, se han encontrado sarcófagos de animales momificados que acompañaban a algunos muertos. Según los estudios, esto se debe a que podían tener un significado simbólico de protección o similar para el difunto. ¿Sabías que también podían tener múltiples capas? La última parte del sarcófago o ataúd solía ser la más sencilla, de madera, mientras que la primera era la más vistosa, llegando a tener en relieve o pintado el retrato de la persona.
Otra de las curiosidades más tétricas de los sarcófagos eran las maldiciones inscritas. Se piensa que era para disuadir a los ladrones, pero también para proteger mágicamente el enterramiento. Sea como fuere, con el descubrimiento de la tumba de Tutankamón murieron de forma prematura varias personas que formaban parte de la expedición. ¿Fue coincidencia? Aunque seguramente no tengas la inquietud de ser enterrado como un auténtico faraón egipcio, los costes de un entierro son realmente grandes, por lo que es conveniente que cuentes con un seguro de decesos que cubra todos los gastos relacionados con el servicio funerario. Es accesible a todos los bolsillos y es un gesto de deferencia con tus familiares y amigos.
Los expertos de Arpem recomiendan:
Sí, suele estar en los 65, 70 u 80 años, dependiendo de la aseguradora. A partir de esas edades, es más complicado encontrar una compañía que pueda asegurarte.
Si te has trasladado por trabajo o cualquier asunto a otra localidad, puedes seguir teniendo tu póliza en la localidad primaria, pero deberás comunicarle a tu aseguradora el cambio. Esto podría modificar la prima e incluso deberías tener en cuenta que sería adecuado modificar las coberturas relacionadas con los traslados.
Dependiendo de tu situación personal, optarás por una prima u otra, pero la más extendida es la nivelada. Esta cuota se mantiene siempre en el tiempo y solo tiene pequeñas variaciones dependiendo de si cambian los gastos de los servicios funerarios en tu localidad.
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