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en reseñas de GoogleUna de las grandes dudas que les surgen a nuestros clientes a la hora de la contratación de un seguro de salud, es la elección de la modalidad, es decir, de si elegir una póliza de copago o sin copago, ya que, lógicamente, la gente no conoce cómo será su estado de salud en tiempos futuros como para tomar una decisión de este tipo. Una decisión que se centra sobre todo en la frecuentación que hagas del seguro, es decir, las veces que acudas al médico y del número de pruebas que realices.
Los copagos son una aportación económica que debes hacer por cada acto médico al que acudas. Cuando se habla de acto médico, es la cantidad de veces que acudes a un especialista.
Aquí tienes un ejemplo: si acudes al alergólogo a que te haga una prueba de alergia genérica, pagarás un copago por acudir al especialista, un copago por la prueba y, dependiendo de la aseguradora, un copago para la recepción de los resultados.
Es al escuchar esta explicación cuando tienes que preguntarte el porqué elegir una de estas pólizas. Pues la explicación es sencilla, el precio de la misma es menor que una póliza sin copago y, para las personas que acuden poco al médico, esta opción es muy interesante, ya que en el cómputo final del año ahorrará más que si selecciona una póliza sin copagos.
Cada aseguradora cuenta con pólizas de copago y sin copago para aumentar la oferta a sus clientes y dar las mayores facilidades a las personas que desean contratar sus servicios. Para entender cada producto debes conocer los tipos de copagos que existen en la actualidad y así saber en cada momento qué es recomendable para ti contratar según tus necesidades.
Uno de los principales criterios para la contratación de un producto con o sin copago, es el precio, ya que las pólizas sin copagos no son siempre accesibles para todas las personas y necesitan el apoyo del copago para la reducción de la tarifa mensual.
En detalle:
| TIPO DE COPAGO | IMPORTE MEDIO |
|---|---|
| Copago Alto | 10 – 15 EUROS |
| Copago Medio | 5 – 10 EUROS |
| Copago Bajo | 0 – 5 EUROS |
| TIPO DE COPAGO | IMPORTE MEDIO |
|---|---|
| Copago por Servicio | Cada servicio un precio |
| Copago Lineal | Todos los servicios al mismo precio |
| Copago por bloque | De 0-7 servicios a un precio; de 8 a 11 un precio… |
Como puedes comprobar, son varios los criterios a tener en cuenta a la hora de elegir el tipo de copago, de ahí la importancia de seleccionar el que más se adecúa a tu perfil según el uso que preveas que vas a realizar con base en tu experiencia anterior.
Algunas aseguradoras tienen un límite anual de copagos en sus pólizas para tranquilidad de sus asegurados. De este modo, tendrás la certeza de que, si enfermas y tus visitas a médico se vuelven más frecuentes, no tendrás problemas con los pagos.
Este aspecto es de gran importancia a la hora de contratar un seguro de salud con copago, y suele darse en pólizas con un copago alto para evitar sustos innecesarios.
Los límites suelen estar entre los 260 y 340 euros al año, y una vez alcanzado este límite anual, la póliza será sin copagos hasta que acabe el año y empieces de nuevo con el pago desde cero.
Lo primero a tener en cuenta para elegir finalmente si quieres una póliza con copago o sin copagos, es el precio. Esto se debe a que cuanto más alto el copago, más barata la mensualidad.
Más allá del precio, debes tener en cuenta la frecuentación de uso que creas que vayas a realizar. Para ello, tienes que pensar el número de veces que fuiste al médico en el año anterior aproximadamente y el número de pruebas que te realizaron. De modo que tomarás esa medida como punto de referencia.
De esta reflexión se puede determinar que:
| TIPO DE COPAGO | ACTOS MÉDICOS |
|---|---|
| Copago Alto | 2 – 3 |
| Copago Medio | 4 – 7 |
| Copago Bajo | 8 – 12 |
| Sin Copago | Más de 13 |
Estas medidas son orientativas y es aconsejable que si no quieres sorpresas a fin de mes, selecciones un sin copago y siempre pagarás lo mismo sin preocupaciones ni sorpresas.
El copago es una alternativa para obtener un seguro médico privado con una prima más ajustada, pero a la vez, puede reducir las visitas al médico de familias con bajos ingresos por no poder permitirse el pago extra del copago.
Respecto al uso del seguro ocurre lo mismo. Muchas personas deciden acudir en caso de urgencia extrema al médico, lo que podría agravar la situación médica de una persona por no realizarse chequeos y revisiones anuales.
Es importante que la salud preventiva sea una prioridad, ya que esto puede ayudarte a no tener que necesitar consultas extra por dejadez personal. El hecho de tener un seguro con copago, es para reducir costes en medicina innecesaria, pero hay una atención preventiva de la que sí hay que hacer uso.
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Tras rellenar tus preferencias sanitarias, aparecerá un listado con las mejores compañías y los precios más competitivos. Una oportunidad para elegir un seguro médico adaptado a tus necesidades.
Antes de seleccionar una póliza, debes analizar tu estado de salud, tu nivel económico y la asiduidad con la que visitas el médico. Estas cuestiones te harán más fácil tomar una decisión sobre el mejor seguro para ti.
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La mayoría de las aseguradoras son más flexibles en su cuestionario de salud a la hora de contratar una póliza con copago ya que casi todas las personas con un seguro con copago acuden menos al médico al tener esta visita un coste adicional.
Durante la anualidad no podrás hacer modificaciones de este tipo en tu póliza, tendrás que esperar a la renovación de tu seguro para poder solicitar la modificación de las condiciones de la póliza contratada. Probablemente, la aseguradora analice el caso y te dé precio para el cambio, ya que cuando se dan estos cambios es porque se piensa que se va a acudir más al médico en esa anualidad. Por lo tanto, algunas aseguradoras analizarán tu perfil médico antes de aceptar el cambio.
Normalmente, las aseguradoras pasan el cobro de sus copagos a mes vencido en la siguiente mensualidad y unido al recibo de pago de la misma. Pero sí existen algunas aseguradoras, como Sanitas, que al tener copagos tan bajos lo hace de manera trimestral para el cliente.
Las pólizas con o sin copago tienen apenas diferencias, por no decir que son iguales en su mayoría, la diferencia sólo radica en el copago que selecciones en la contratación de cara al precio mensual que quieras abonar.
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